Boxeo

La Sombra se levanta

José Suero intentará recuperar el título nacional superwélter el sábado en Porriño | El boxeador y su entrenador, Manuel Jiménez, dolidos por la falta de apoyo del Concello de Vigo

José Suero, ayer, en La Vieja Escuela.

José Suero, ayer, en La Vieja Escuela. / Alba Villar

Armando Álvarez

Armando Álvarez

Nadie baila siempre. Caer y levantarse constituye la esencia del boxeo. Lo sabe bien José Gregorio Suero Martínez, la “Sombra”, que este sábado intentará recuperar su título nacional del peso superwélter. Suero ha tenido que recomponerse de golpes más duros que los ganchos de sus rivales. La polémica actuación del árbitro en su derrota ante Óscar Díaz le hizo replantearse la retirada. A él y a su entrenador, Manuel Jiménez, le duelen las puertas que en Vigo se le cierran. Será en Porriño donde el vigués se mida a Sergio Fernández.

Suero se adueñó por primera vez del cinturón de campeón el 27 de marzo de 2021. El primer título nacional para el boxeo olívico en veinte años. Aquella noche noqueó al pamplonica David Soria en un Navarra Arena abarrotado. Defendió su trono con acierto en Noia ante José Manuel Clavero. Camino de la siguiente defensa probó fortuna con el título intercontinental de la IBO. Pero el alemán Slawa Spomer fue superior en el Roemerhalle de Heilbronn. Suero y Jiménez aceptaron la justicia del resultado.

Nada que ver con la siguiente pelea. El púgil de La Vieja Escuela viajó a Alcalá de Guadaira, hogar de Óscar Díaz. A su retador lo derribó en el segundo asalto. Volvió a llegarle con claridad después. Pero el árbitro, en ambas ocasiones, sancionó al gallego de origen dominicano por una ilegalidad en los golpes que desde su esquina se negó. Desorientado, Suero encajó un directo y Jiménez le recomendó apoyar la rodilla para recuperar el resuello. El árbitro decretó la derrota.

“Lo que me hicieron fue descarado”, lamenta Suero. Jiménez lo define como “una 'piratada'. No sé si fue algo premeditado, no lo quiero llamar así, pero es una pelea que José gana por KO en el segundo asalto y no sé por qué al final la acabó perdiendo”. Admite su alivio al pelear esta vez en casa: “Más tranquilos estamos. Eso no va a suceder”.

Sin embargo, y aunque de antemano estaba pactada, no habrá revancha con Óscar Díaz. El andaluz ha renunciado al cinturón para optar a alguno europeo. Suero acudirá al enfrentamiento igual que el asturiano Sergio Fernández, ambos aspirantes a un trono vacío.

No es lo único en que se imitan. Presentan registros parecidos. Suero, 9 victorias (4 por KO), 2 derrotas y un nulo a sus 29 años; Fernández, 13 victorias (3 KO), 2 derrotas y 1 nulo a sus 30. El gijonés también ha sido campeón de España en dos ocasiones, aunque del peso medio.

Esa mudanza de Sergio Fernández, del tope de 72’57 kilos a 69’85, es un factor que puede favorecer a Suero, aunque Manuel Jiménez acota sobre su adversario: “Ya hizo la última pelea cercana a este peso. Puede influir, pero es algo que tienen que ver en su esquina”.

A Fernández, en cualquier caso, lo considera el entrenador “un rival a tener en cuenta. Sabe a lo que viene. Es un chico fuerte, que va para adelante, clásico. No es un virtuoso de las esquivas pero tiene un buen boxeo cerrado y bien armado”. La contienda se plantea como una confrontación de identidades. “Nuestra estrategia es seguir nuestro estilo, el de siempre, boxeando un poco en la distancia. Estamos preparados y adaptados para el tipo de pelea que se nos presente”.

Jiménez revela que su pupilo “está un poco desencantado con el Concello de Vigo. Es triste que un boxeador no pueda ejercer en su ciudad porque un político, Abel Caballero, decide que no le gusta el deporte. Si no fuese por la Xunta, no podría realizar este evento. Han puesto dinero y facilidades”.

El viejo pabellón de Porriño acogerá una velada que comienza el sábado a las 20.30. Las entradas (25 euros en grada, 35 en silla normal y 50 en silla VIP) se venden previamente en La Vieja Escuela, Cafetería Lirón en Porriño y Cafetería Pomodoro en Vigo. El cartel incluye cuatro combates profesionales y cinco neoprofesionales; entre estos últimos, el primer campeonato gallego femenino, protagonizado por Erika Cobas y Clara Miralles. “Se ha tirado la casa por la ventana”, bromea Jiménez. Suero y Fernández deberían saltar al cuadrilátero alrededor de las 23.00. “Estoy bien, motivado, con ganas de que llegue ya el sábado”, anuncia Suero. “Será una pelea dura. Pero intentaré quedarme el cinturón”.