La Cofradía de Baiona lleva a juicio a cuatro furtivos por pertenencia a banda organizada

Pide 4 años de prisión para tres de ellos y uno para el cuarto y sanciones de 6.000 euros | La Fiscalía los acusa solo de delitos contra la fauna y solicita inhabilitarlos para mariscar

La lonja de la Cofradía de Baiona. |   // ALBA VILLAR

La lonja de la Cofradía de Baiona. | // ALBA VILLAR / Neli Pillado

Se enfrentarán a los correspondientes delitos contra la fauna, como tipifica el Código Penal los de furtivismo continuado, pero también al de pertenencia a banda organizada. Cuatro percebeiros ilegales de Baiona se sentarán en el banquillo acusados de formar parte de un grupo criminal dedicado a la extracción de percebe sin autorización de ningún tipo ni control de tamaño ni cantidad, en el que hay un líder, dos ejecutores del marisqueo y un encargado de vigilar que las fuerzas de seguridad o los guardapescas y guardacostas de Cofradía y Xunta no los pillen, además de transportar a los compañeros y la mercancía.

Así lo indica el escrito de acusación particular que formula el pósito baionés en la macrocausa que el Juzgado de Instrucción Número 6 de Vigo acaba de cerrar tras dos años de seguimiento a los cuatro investigados. Todavía no hay fecha de juicio pero se espera que las vistas se convoquen para antes del verano.

A lo largo de estos dos años, los guardapescas les han incautado 611 kilos de percebe

La Fiscalía no va tan lejos en su petición de pena. Les atribuye delitos contra la fauna a los cuatro investigados y quebrantamiento de condena a uno de ellos, que fue interceptado mariscando pese a haber sido inhabilitado para ello en 2022. Aquella sentencia le imponía una multa que no llegó a pagar y por ello inresó en prisión.

Objetivo: una pena ejemplarizante

El objetivo de la Cofradía es precisamente lograr una pena ejemplarizante para los delincuentes que esquilman el crustáceo. Y es que, desde que el furtivismo pasó de infracción administrativa a delito penal en 2015, apenas han entrado mariscadores ilegales en la cárcel y si lo han hecho ha sido por incumplir con las sanciones económicas de los fallos judiciales. Se trata de personas declaradas insolventes que acumulan sanciones económicas de más de 400.000 euros en uno de los casos y de más de 78.000 en otro, que nunca han abonado.

Por ello la entidad promovió, en colaboración con la Guardia Civil, esta macrocausa de dos años de duración. Los guardapescas de la entidad realizaron un seguimiento exhaustivo de los cuatro infractores desde julio de 2021 hasta mayo de 2023. Les incautaron un total de 611,9 kilos de percebe en 38 operaciones de acuerdo con el instituto armado, que abrió una investigación.

A raíz de este control continuado, el abogado de la Cofradía, Alberto Muñoz, sostiene que estas cuatro personas, viejos conocidos de los vigilantes, actuaron “en ejecución de un plan preconcebido, perfectamente coordinadas” en la costa que gestionan las cofradías de Baiona y A Guarda, desde Monteferro hasta el municipio guardés, “sin permiso habilitante” e “indiscriminadamente e zonas y períodos de veda, en días y horarios prohibidos, al margen de los canales sanitarios y legales de comercialización (lonjas)” e incluso, sin respetar la talla mínima ni los cupos máximos de captura diaria (3 kilos por persona).

Dos de los acusados suman decenas de denuncias y multas por más de 400.000 euros sin pagar

Por todo ello, por el delito de pertenencia a banda organizada, solicita cuatro años de prisión para el supuesto cabecilla y para los dos miembros que extraían el percebe y uno para el hijo del líder, que se dedicaba presuntamente a vigilar desde la carretera con una motocicleta. Por furtivismo, les reclama 6.000 euros de multa a cada uno y 5 años de inhabilitación para pescar o mariscar. Por el quebrantamiento de condena, reclama 8.640 euros. A todo ello suma la solicitud de que entre todos indemnicen a la Cofradía con el valor del marisco incautado, todavía sin calcular.

Aunque no lo recoge en el listado de delitos que les atribuye, la Fiscalía sí afirma en su escrito que actuaron “en ocasiones todos ellos conjuntamente y en otras ocasiones solos o con alguno o algunos de los restante acusados”. Por el delito contra la fauna pide 3.000 euros de multa para tres de los imputados y 4.500 para el que acusa de saltarse la inhabilitación. Para este último, por el quebrantamiento de condena, le solicita otros 4.500 euros. La inhabilitación de 4 años para mariscar la extiende a los cuatro y a los cuatro también les reclama la correspondiente indemnización a la Cofradía.

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