Reclaman el desdoble de una clase de Primaria del colegio de Reboreda

La Anpa justifica la demanda al coincidir en el aula cuatro alumnos con necesidades especiales

El colectivo de padres del CEIP de Reboreda en una reunión.  // ANPA

El colectivo de padres del CEIP de Reboreda en una reunión. // ANPA / REDACCIÓN

REDACCIÓN

La Asociación de Nais e Pais (Anpa) del colegio público de Reboreda reclama a la Consellería de Educación el desdoblamiento de una clase de Primaria. El colectivo de padres justifica esta demanda porque aunque se cumple la ratio de 25 alumnos máximo por clase, se da la circunstancia de que varios de los niños precisan de atención especial, por lo que consideran necesario que el aula se reparta en dos.

Según explicaron los padres a través de la Radio Municipal, ya han trasladado esta petición a la Consellería de Educación y advierten que no se descarta el inicio de movilizaciones en el caso de que no se atienda su demanda.

Los padres y el profesorado señalan que, aunque el número de alumnos de la clase está dentro de la legalidad, las características particulares de este aula con al menos cuatro escolares con necesidades educativas especiales recomienda hacer un desdoble. En este sentido, justifican que sería la única forma de que cada niño disponga de la atención que necesita ya que una de las niñas precisa de cuidadora y hay otros alumnos con trastorno del espectro autista (TEA), déficit de atención e hiperactividad (TDAH) o del lenguaje (TEL).

Esfuerzo del profesorado

Según explicó ayer en una entrevista en la Radio Municipal el padre de una de las alumnas de este aula, Manuel Gil Carreira, el colectivo de padres “agradece o esforzo que fai a profesora por atender a todos os nenos”, pero insiste en que a pesar de esa dedicación personal “é moi complicado atender de forma individualizada aos que así o precisan nunha aula con estas características”.

Desde el centro educativo ya trasladaron la demanda de la asociación de padres a la Consellería de Educación para crear una segunda aula en ese curso, pero hasta el momento no han recibido una respuesta positiva. Los afectados no descartan poner en marcha distintas medidas de presión en caso de que no se atienda su demanda. En este sentido asegura que están dispuestos a salir a la calle a protestar porque se trata de “unha petición razonable e urxente”, destaca Manuel Gil.