Los vecinos de Rande no necesitaron espadas ni cañones para vencer en su última batalla. Las gestiones realizadas por la asociación cultural de la parroquia ante el alcalde lograron el fruto esperado y este sábado se podrá celebrar la fiesta conmemorativa del histórico combate naval librado en la ría en 1702.
La falta de apoyo de la oposición a una transferencia de fondos para los convenios de cultura, con el que debía de financiarse la fiesta de Rande, puso en riesgo la celebración de este evento que rememora la batalla librada hace tres siglos entre las escuadras anglo-holandesa e hispano-francesa. Finalmente el gobierno local garantizó a la organización una aportación económica, aunque no alcanza el total previsto en principio y tendrán que rebajar el presupuesto en un 40 por ciento. "Esto nos ha obligado a realizar ajustes pero la fiesta se va a celebrar con todo el programa previsto sin renunciar a nada, así que los asistentes disfrutarán de todos los actos al igual que en las pasadas ediciones", señaló ayer el presidente de la Asociación Cultural de Rande, Juanjo Comesaña.
La fiesta de la Batalla de Rande, en su cuarta edición, arrancará mañana con una de las novedades de esta edición. Será una mesa redonda en la Casa da Cultura de Redondela,a las 19.00 horas, con la presencia del director do Museo do Mar de Galicia, Vicente Caramés, el arqueólogo subacuático y autor de varias monografías sobre la batalla, Ramón Patiño, y el historiador y asesor científico del Meirande, José Martínez Crespo. El acto estará moderado por el arqueólogo y director de la museología del Meirande, Xurxo Constela.
El viernes, a las 20.00 horas, se realizará el desembarco de la plata de indias y el ataque de las tropas enemigas anglo-holandesas en la playa de Cesantes, una representación teatral similar a la realizada el pasado año en Chapela con el fin de involucrar a otras parroquias en la celebración.
El sábado, día grande de la fiesta, se escenificará la batalla durante toda la jornada en las inmediaciones de Meirande. El evento estará ambientado por más de 150 figurantes vestidos con trajes de época y decenas de embarcaciones tradicionales que acudirán a la ensenada de San Simón para realzar el protagonismo de este combate naval.
