El peor equipo en el primer cuarto de hora

El Celta, que ha encajado 12 goles en los quince primeros minutos, condenado a pelear por la permanencia

Iñaki Williams se adelanta a Aidoo para rematar a gol el centro desde la derecha de Óscar de Marcos. // LUIS TEJIDO

Iñaki Williams se adelanta a Aidoo para rematar a gol el centro desde la derecha de Óscar de Marcos. // LUIS TEJIDO / J. conde

Carlos Carvalhal continúa sin encontrar la solución a la falta de concentración con la que el Celta inicia los partidos. No hay peor equipo en LaLiga que el céltico en cuanto al número de goles encajados en el primer cuarto de hora. En ese tramos de los partidos ha encajado 12 de los 50 tantos que contabiliza en contra. Estos lapsus mentales en los primeros minutos de juego se han repetido en las cuatro últimas jornadas, saldándose con derrotas para los celestes, obligados a romper cuanto antes la negativa dinámica de resultados para no ver comprometida su permanencia en la máxima categoría cuando restan tres jornadas para concluir el campeonato.

Nadie esperaba que el Celta volviese a formar parte del vagón de cola de LaLiga después de su triunfo ante el Elche, con el que casi dejaba asegura la permanencia en Primera División por duodécima temporada consecutiva. Era la culminación del buen trabajo realizado por el equipo vigués con Carvalhal, que había reemplazado a Eduardo Coudet para arreglar una mala trayectoria en LaLiga. Esa dinámica positiva que se inició con el técnico portugués comenzó a cambiar tras el parón de marzo para los compromisos de las selecciones nacionales.

Desde entonces, los célticos solamente han sumado 5 de los 27 puntos en juego, números que lo convierten en el peor equipo de la competición en las nueve últimas jornadas. El Getafe ha sumado 6 puntos, por 7 del Valladolid, Espanyol y Elche, que ya está descendido desde hace semanas.

Esos pésimos registros, similares a los que le costaron el puesto a Coudet, han tenido mucho que ver con el pésimo arranque de los partidos, en los que el Celta ha dado excesivas ventajas a los adversarios. El primer remate ha condenado al Celta de Carvalhal en seis partidos, desde mediados de febrero. Y todos ellos en los primeros minutos. Comenzó Oyarzabal en Anoeta, aunque los celestes lograron empatar en el descuento para llevarse un valioso punto.

Ese fallo de concentración se repitió ante el Almería (Babic, minuto 7), el Villarreal (Nico Jackson, 2), el Getafe (Enes Unal, 3), el Valencia (Kluivert, 8) y el Athletic Club (Iñaki Williams, 5). Las continuas charlas de Carvalhal a sus jugadores de poco han servido para solucionar un problema con unas consecuencias imprevisibles a falta de tres jornadas para el cierre del curso.

La inconsistencia de los célticos en los comienzos de los partidos fue aumentando con Carvalhal. De las 12 jornadas en las que el equipo vigués encajó un gol en el primer cuarto de hora, 10 se produjeron con el entrenador de Braga. Con Coudet, el Celta solo se dejó sorprender en los primeros minutos ante el Real Madrid (gol de Benzema, minuto 14) y el Atlético de Madrid (Correa, minuto 9).

La mala racha de Carvalhal en los minutos iniciales comenzó en su debut en el banquillo céltico. El osasunista Chimy Ávila adelantó a su equipo con un gol en el minuto 8. El Celta acabó cayendo tras otro tanto del argentino antes de la media hora de partido.

En esa docena de compromisos en los que el rival se adelantó pronto, el equipo de Carvalhal solo pudo sumar seis puntos. Tres los obtuvo en el Villamarín, después de que Juamni adelantase al Betis en el minuto 8. El Celta aguantó y acabó ganando por un abultado 3-4. Los otros fueron fruto de tres empates (Villarreal, Real Sociedad y Almería).

Ese escaso poder de reacción se disipó en las últimas jornadas, en las que el Celta ha sido incapaz de remontar un marcador adverso que ha permitido generalmente desde los primeros minutos.

Y en ese escenario, el Celta afronta un final de curso inesperado. Ha descendido dos puestos en la tabla. Ahora es decimoquinto, a cuatro puntos del descenso, cuando restan tres partidos. Los célticos, junto al Valladolid, son los que llegan en peor dinámica. Los celestes encadenan cuatro derrotas; los vallisoletanos, cinco. Su última victoria en Pucela fue ante el Girona, que mañana visita Balaídos.