José Bordalás, entrenador del Getafe, no quiso hablar ayer de la mala situación que vive el Celta, con su técnico Fran Escribá en entredicho. El preparador del conjunto azulón prefirió guardarse sus valoraciones acerca del mal momento que vive el club gallego y declaró que sólo quiere opinar de los aspectos deportivos de su contrincante."No suelo opinar de los rivales. Todos los rivales me merecen un grandísimo respeto. Estamos centrados exclusivamente en nuestro equipo. Estamos inmersos en competición oficial, en Europa League y tratamos de solucionar los temas que corresponden a nuestro equipo", comentó.

Sí valoró la plantilla del Celta, de la que afirmó que es "magnífica" e indicó que el equipo de Fran Escribá tiene jugadores "de un nivel altísimo" después de hacer fichajes "muy importantes" este año.

"Es el caso de Denis Suárez, un jugador muy importante. Al final, con la plantilla que tenían y con las incorporaciones que han hecho, creo que es un plantel de un nivel altísimo. Es un partido difícil, porque están necesitados de puntos y siempre ha sido un escenario complicado para los rivales", indicó.

Reconoció que "es posible" que haga rotaciones para enfrentarse al Celta porque muchos de sus hombres están sumando muchos minutos y apuntó que todos están preparados para ayudar al Getafe.

Cuestionado por los objetivos de su equipo, afianzó el discurso que casi cada fin de semana lanza ante los medios de comunicación: "Miramos al próximo partido. Siempre ha sido así. El pasado no te ayuda y el futuro, tampoco. En el fútbol hay que pensar en el presente y el presente es el Celta, un partido muy difícil y de mucho nivel. Les tenemos mucho respeto. Ese es el objetivo, partido a partido, paso a paso y con toda la humildad del mundo", finalizó.