El Celta quiere brindar a su afición seis horas de fiesta ininterrumpida en Balaídos para certificar primero, y celebrar después, la permanencia. El último episodio de "A Nosa Reconquista" se puso en marcha cuatro horas antes del inicio del choque contra el Rayo Vallecano. El club ha querido animar a su hinchada a calentar el ambiente previo con choripanes y cerveza gratis. La grada de Siareiros en la zona de Río Bajo ha vuelto a ser el escenario elegido. Cientos de celtistas se han vestido con sus mejores galas para comer, beber y coger fuerzas antes de recibir al autobús del equipo frente a la grada de Tribuna.

Tal y como sucedió hace dos semanas antes del Celta-Barça, un DJ, gaiteiros y percusionistas acompañaron a la afición dentro del estadio mientras disfrutaron de los choripanes y de la cerveza. La entrada al municipal vigués, por la puerta 16, fue de acceso libre para todos los celtistas, con o sin entrada.

La fiesta dentro de Balaídos pasó al exterior del estadio a las 18.45 horas, momento en el que empezó la espera del autobús de la plantilla celeste. Miles de personas, con sus cánticos, sus bufandas y sus bengalas azules repitieron el cálido recibimiento a los jugadores que llevan brindándole los últimos cinco partidos que el Celta ha disputado como local.

Último baño de celtismo para certificar la permanencia

Último baño de celtismo para certificar la permanencia