Dos heridos tras una macropelea en la que patearon la cabeza a un empresario meco

Dos hombres han resultado heridos de gravedad durante una sucesión de peleas multitudinarias ocurridas ayer, de madrugada, en el centro urbano de O Grove.

Uno de los heridos, el cual quedó inconsciente y tuvo que ser trasladado en ambulancia de forma urgente, estaba inicialmente entre los presuntos agresores, pero acabó siendo golpeado por sus propios compañeros, quizás porque trató de impedirles el primer ataque.

El mismo que tuvo como protagonista a un conocido empresario de O Grove al que una quincena de jóvenes tiraron al suelo y patearon de forma brutal, causándole importantes heridas en la cabeza.

Así lo explica el propio hostelero, visiblemente dolorido y con signos evidentes en su cara que dan cuenta de la brutal agresión que ha sufrido.

Relata que todo sucedió pasadas las dos de la madrugada a las puertas de su negocio, en la calle Luis Seoane de O Grove.

Orinando en la fachada

“Eran quince o veinte personas de Madrid que llegaron a O Grove para acudir a una boda en A Toxa, y todos se estaban comportando de forma totalmente normal hasta que uno empezó a orinar en la puerta de mi local”, explica la víctima.

Lo que hizo fue dirigirse a él para pedirle que cesara en su actitud “y reaccionó muy bien, dejando de hacerlo e incluso pidiéndome disculpas”, confirma. Todo parecía ir bien hasta que el empresario grovense vio que ese grupo abandonaba la zonas llevándose vasos de cristal, “por lo que fui tras ellos para cambiárselos por otros de plástico”, relata.

En ese instante, “uno de los madrileños se revolvió, cogió una señal de obras que había en la calle y la tiró, por lo que le reproché su actitud y le pedí explicaciones”. Fue en ese momento cuando “empezaron a increparme todos los demás, hasta que uno de ellos me golpeó y me tiró al suelo”.

Brutal agresión

El empresario meco agredido recuerda que cuando se caía “lancé los vasos que llevaba en mis manos para no cortarme, y ya cuando estaba tirado, empezaron a darme puñetazos y patadas sin parar, casi todos en la cabeza”.

Mientras trataba de protegerse con los brazos, los agresores seguían insultándolo y pegándole sin parar, tal y como constató la pareja del agredido, que salió del local en cuanto se enteró de lo que estaba pasando para interceder por su marido.

Fue así como la víctima de la agresión consiguió salir de allí y refugiarse en el establecimiento para pedir ayuda a otros clientes y a la Guardia Civil.

En ese instante, cuando las cosas parecía que iban a calmarse, comenzó la segunda pelea, pero esta vez entre el grupo de los agresores. Fue en esa bronca, según indica el empresario meco, cuando el otro hombre –parece que uno de los ciudadanos de Madrid– resultó herido de gravedad y acabó inconsciente sobre el suelo.

“A él lo llevaron al hospital y yo me fui con la Guardia Civil y al centro de salud, donde ya enviaron el parte de lesiones al juzgado”, sentencia el conocido hostelero grovense.

Lo dice desde el convencimiento de que estuvo “a punto de morir” y de que fue la mediación de su mujer y de dos clientes lo que le salvó la vida.

Clientes y amigos, por cierto, a los que el herido tuvo que disuadir para evitar males mayores, ya que ayer pretendían desplazarse a la isla de A Toxa para sabotear la boda a la que asistían como invitados los agresores madrileños.

Los mismos agresores del hostelero habrían protagonizado diversos altercados previos, a lo largo de la tarde del sábado, en otros locales de la villa.