Las rebajas desafían a la lluvia (y a la cartera)

Notable afluencia de clientes en los comercios de la comarca

Clientes en la zona comercial de Alcalde Rey Daviña, en Vilagarcía de Arousa. |   //  NOÉ PARGA

Clientes en la zona comercial de Alcalde Rey Daviña, en Vilagarcía de Arousa. | // NOÉ PARGA / Manuel Méndez

Manuel Méndez

Manuel Méndez

El primer fin de semana de rebajas ha sido “ciertamente positivo”, según coinciden en señalar todos los comerciantes consultados.

Sucede que acudió tanta o más gente que otro años, si bien es cierto que los clientes parecen haber controlado mucho más el gasto.

Así lo confirman en diferentes tiendas, tanto del pequeño comercio como de conocidas franquicias, tras disfrutar de un finde intenso.

Sobre todo en la tarde del sábado y en la ciudad de Vilagarcía, de nuevo con la comercial calle Alcalde Rey Daviña como punto de referencia.

Arzobispo Lago

Aunque sin perder de vista negocios como los asentados en la calle Castelao, Arzobispo Lago, plaza de Galicia y el centro comercial Arousa.

“El sábado tuvimos una auténtica avalancha de gente, y puede que incluso mayor que en el primer sábado del año pasado”, señala ayer una joven vendedora de una tienda de ropa.

Coinciden en esta apreciación otros comerciantes que ayer, sin embargo, decidieron no abrir sus puertas, dejando que las grandes cadenas llevaran la voz cantante de la jornada dominical.

Las rebajas movilizan a los arousanos, aunque controlen más lo que gastan

Una mujer sale con sus compras de una de las tiendas. / Noé Parga

“Lo cierto es que no esperábamos tener tanta gente, y mucho menos con el mal tiempo que hemos tenido”, reflexionaba ayer otro vendedor.

La lluvia no pudo con ellos

Es evidente que ni siquiera la lluvia pudo disuadir a los arousanos, que en algunas tiendas llegaron a formar largas colas para pasar por caja.

Algunos de esos compradores decían haberse apretado el cinturón a causa de la crisis. “No hay tanto dinero para gastar porque todo ha subido una barbaridad, pero hay que aprovechar las rebajas para algún capricho”, explicaba una joven mientras hacía cola para pagar.

Las rebajas movilizan a los arousanos, aunque controlen más lo que gastan

Ciudadanos con bolsas en la calle Alcalde Rey Daviña. / Noé Parga

“En mi caso vengo para comprar exclusivamente lo que necesito, ya que no están los tiempos para derrochar”, apostillaba otro cliente, situado a escasos metros.

En definitiva, que a pesar de la crisis y el mal tiempo, la afluencia de público fue notable en las calles más comerciales de ciudades como Vilagarcía, y eso también se hizo notar en los negocios de hostelería, con algunos bares y cafeterías llenos hasta la bandera.

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