Los usuarios de las líneas de autobús que circulan por las avenidas de Rubiáns y de Pontevedra (entrada a la ciudad por la N-640) se han visto sorprendidos por la presencia de nuevas marquesinas, alguna de ellas compitiendo con el modelo anterior.

El Concello de Vilagarcía ha adquirido dieciséis nuevas cabinas que forman parte de la primera fase del plan de mejoras del mobiliario urbano en el rural.

Estas nuevas casetas para que los usuarios del transporte público de pasajeros puedan refugiarse de las inclemencias meteorológicas mientras esperan que el autobús llegue a la parada, tienen como característica principal su accesibilidad para las personas que lleven carros con bebés o tengan problemas de movilidad.

El Concello de Vilagarcía de Arousa continuará en una segunda fase con el plan de renovación de las estructuras para las paradas de autobuses y ya consiguió habilitar una partida presupuestaria de 221.000 euros. El objetivo es homogeneizar la imagen de las marquesinas y mejorar el confort de los usuarios del servicio de autobús.