Los mariscadores de la ría de Arousa, especialmente las mujeres, ya que son ellas las claras dominadoras del colectivo de marisqueo a pie que faena en la zona intermareal, aprovechan episodios de bajamar como el vivido a mediodía de ayer para eliminar los mantos de algas que cubren sus zonas productivas y constituyen una auténtica amenaza para especies de bivalvos tan importantes como la almeja y el berberecho.
Aunque estas labores pueden resultar mucho más intensas el día 17, porque la bajamar será entonces mucho más acusada que en este arranque de mes, hay que decir que ayer cientos de mariscadores de a pie se emplearon a fondo para retirar esta vegetación marina, que en mayor o menor medida afecta a todas las agrupaciones de mariscadoras y cofradías de pescadores, tanto en la orilla sur de la ría como en la norte.
A modo de ejemplo cabe destacar que en el caso concreto de Cambados ayer se reunieron cerca de doscientas mujeres en el banco marisquero de Fefiñáns para proceder a la limpieza de los mismos, retirando las algas siempre de forma artesanal y tratando de causar el menor impacto posible.
Esta acción seguida desde tierra firme por numerosos curiosos, se repite periódicamente tanto en esta localidad como en Vilanova, O Grove y A Illa, si bien en este último caso hay que puntualizar que la cofradía dispone de un plan de explotación para especies de algas de interés comercial, y no cabe duda de que esta acción genera importantes beneficios adicionales en dicho puerto.
En relación con las algas que constituyen una plaga, hace apenas quince días la cofradía isleña alertó de los primeros problemas de mortandad en sus autorizaciones marisqueras, y más concretamente en la playa de Riasón, donde se acumuló un extenso manto verde.
La presidenta de la Organización de Productores (OPP20), Maricarmen Dios Castro, mostraba entonces su preocupación por la proliferación de algas. Primero intentaron sacarlas desde un barco, después con ayuda de una máquina y en esta última ocasión manualmente, como ayer hacían las mariscadoras de Cambados en el banco de Fefiñáns.
