El Ministerio de Fomento aseguró ayer que las obras de la Alta Velocidad Ferroviaria no se verán afectadas por el descubrimiento de un yacimiento arqueológico con restos de la época romana en la zona de Reza Vella, en el barrio de O Pino. El hallazgo se produce en el marco de las excavaciones iniciadas el pasado 2 de agosto autorizadas por la Dirección Xeral de Patrimonio de la Xunta por tratarse de una zona de respeto de la capilla prerrománica de Santa Catarina, un elemento recogido en el catálogo de patrimonio cultural del PXOM.

El ministerio que dirige José Blanco garantizó ayer, a través de la Administración de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) que el proyecto "mantiene los plazos de entrega" y que, por el momento, "no se ha planteado ninguna modificación del proyecto".

De hecho, los trabajos que se venían realizando en esta zona consistentes en la explanación previa al montaje de las vías se ha paralizado en el tramo acotado por los arqueólogos pero continúa en el resto del trazado correspondiente al acceso del AVE a la Estación Empalme.

La prospección, según informó la Xunta de Galicia, fue autorizada a instancias de Copasa, empresa adjudicataria del proyecto, a raiz de los resultados de los sondeos previos realizados en mayo. El director xeral de Patrimonio de la Xunta dio luz verde a la excavación el pasado 2 de agosto estableciendo como plazo para la realización de los trabajos 85 días.

Adif manifestó ayer que la trascendencia del hallazgo no se conocerá hasta que los arqueólogos finalicen su trabajo y que de la catalogación definitiva de los restos dependerá el desarrollo de las obras. En cualquier caso, apuntan que hasta el momento en la zona noroeste "no hemos tenido que variar ningún proyecto" e insisten en que la aparición de yacimientos es muy frecuente en las obras del AVE. Sólo en Cataluña, por ejemplo, se descubrieron 111, de los cuales 65 no constaban en las cartas arqueológicas.

En el caso de Reza Vella, las catas iniciales recomendaron realizar la excavación, por lo que ADIF contrató a una empresa privada para ejecutar las prospecciones. La celeridad que requiere la investigación, pues sólo disponen de 85 días para los trabajos, y la amplia extensión de terreno, ha implicado la participación de un equipo de cuarenta arqueólogos que trabaja en tres fases y bajo la supervisión de Patrimonio. La primera parte de la excavación ya ha finalizado y en el informe remitido a la Xunta el 27 de agosto se recoge el hallazgo hasta el momento de fosas colmatadas con restos de la época romana como molinos, tegulae e imbrex, así como posibles restos de una calzada romana. Pese a las especulaciones de que pueda tratarse de una parte de la vía VIII que conectaba la ciudad con Tui y secundaria de la XVIII, los expertos consultados creen más probable que se trata de la calle interior de un poblado romano. Es el caso del director del Museo Arqueolóxico Provincial, Xulio Rodríguez, que apunta que "non é nada raro que apareza un asentamento nesa zona tendo en conta a situación da capela e a proximidade da zona termal", en referencia a la sucesión de termas por la margen derecha del Miño, a escasos metros del yacimiento. Xulio Rodríguez considera que "máis estrano é o da vía romana". En todo caso, sostiene que cualquier hallazgo de este tipo constituye un "elemento máis para coñecer a historia antiga de Ourense" y relaciona el descubrimiento con otros yacimientos de la ciudad, como el de Santomé, si bien éste "é moito máis complexo porque ten un castro".

Por su parte, la Dirección Xeral de Patrimonio de la Xunta, que será la entidad responsable de los hallazgos, no ha querido pronunciarse todavía respecto a la importancia de los restos "mentres non se rematen os traballos arqueolóxicos".

Conjugar la conservación del patrimonio con el progreso

El descubrimiento de los restos romanos no tiene por qué afectar a las obras del AVE y así lo ha manifestado el Ministerio de Fomento. En este sentido, el propio director del Museo Arqueolóxico Provincial, Xulio Rodríguez, defendía ayer que es posible conjugar la conservación del patrimonio histórico y cultural con el progreso "sen entorpecelo". En este sentido, afirma que "a arqueoloxía non ten por que ser unha traba", y asegura que se puede hacer una excavación con rapidez para valorar los hallazgos "e en función dos resultados actuar".

El museo que él dirige es el encargado de recepcionar las piezas que se vayan extrayendo de la excavación, aunque hasta el momento la única comunicación que ha recibido es el aviso de la Xunta de que se ha autorizado la excavación y que los materiales se irán enviando al museo.

Posible actividad doméstica

Entre los hallazgos se encuentran varias tegulae, que son tejas planas de tipo romano, y varios ejemplares de imbrex o teja curva que no tiene por que ser de tiempos romanos sino que se mantuvo en épocas posteriores, como la medieval. La aparición de molinos puede indicar actividad doméstica, lo que daría más fuerza a la probabilidad de que se trate de un poblado con una calle central.