Un grupo de 50 vecinos de Vigo y Pontevedra se quedará hoy sin visitar las instalaciones del Museo da Minería de Fontao porque desde el Concello se les comunicó que no hay nadie que pueda desplazarse al poblado minero para abrir el complejo. La organización de la excursión ya tuvo que solicitar por escrito una autorización para ver el museo, cuya respuesta por escrito nunca llegó, hasta que hace escasos días se les comunicó esta incidencia.

Ello pone en evidencia, una vez más, el funcionamiento en precario de un museo que fue inaugurado en 2012 pero que no puede abrir si no cuenta con aportes económicos de otras administraciones. El gobierno municipal calcula que precisa 100.000 euros y, de momento, solo llegó a haber comprometidos 6.000 euros por parte del anterior ejecutivo de la Diputación de Pontevedra.

La comitiva realizará una ruta de senderismo para conocer enclaves cercanos como el monasterio de Carboeiro y la Fervenza do Toxa. Además, habrá una visita al conocido como monte Burubú, desde el que se hay una excelente panorámica de las minas.