La Diputación gastó 14 millones de euros en la construcción de las cuatro pousadas do Salnés. Fue uno de los proyectos más ambiciosos del expresidente provincial, Rafael Louzán, pero estos lujosos hoteles siguen cerrados a cal y canto. El PP alerta de que esta situación las abocará a un deterioro inexorable, e insta al nuevo gobierno de la Diputación a que las ponga en marcha a la mayor brevedad posible, "porque los flecos que faltan no son insalvables", y "esta es una oportunidad para el desarrollo socioeconómico de la comarca a través de un producto de excelencia turística que hoy en día se está desaprovechando", en palabras del diputado conservador Ángel Moldes.

Los diputados provinciales del PP de O Salnés, Luis Aragunde y Salomé Peña, el alcalde de Meis, José Luis Pérez y Ángel Moldes comparecieron ayer a las puertas de la pousada de A Armenteira, en Meis, que ya está finalizada y amueblada. Los responsables populares anuncian que presentarán una serie de preguntas en el próximo pleno de la Diputación, pues quieren saber por qué siguen cerrados los hoteles y que planes tiene para ellos el equipo que dirige la socialista Carmela Silva.

Según Ángel Moldes, el bipartito provincial tiene "dos pilares", que serían según él "copiar los proyectos del PP o paralizarlos", y que las pousadas serían "un claro ejemplo" de esta última estrategia. Moldes afirma que lo único que dejó pendiente el anterior gabinete de Rafael Louzán fue "firmar el acto de inicio", y que si el PSOE y el BNG tuviesen "predisposición política" se podrían abrir en breve los establecimientos.

Denuncia en Fiscalía

Carmela Silva anunció hace un mes que iba a mandar un escrito a Fiscalía para que investigase la gestión de varios proyectos de Louzán, entre ellos las pousadas. Sobre esto, Ángel Moldes declaró ayer que "tenemos serias dudas de que acudiesen finalmente a Fiscalía", y el gabinete de Presidencia de la Diputación no quiso aclarar a preguntas de este periódico si en efecto ya se ha dado ese paso.

El proyecto de las pousadas lleva meses rodeado por la incertidumbre. La empresa que se hizo con la gestión de los cuatro establecimientos (situados en A Lanzada, A Armenteira, Ribadumia y Cobas, en Meaño) no quiere hablar sobre las pousadas; Louzán incumplió su promesa de abrirlas antes del verano pasado, y no explicó a qué se debió el retraso; y el PSOE tampoco muestra demasiado interés en hablar de este millonario y controvertido proyecto.