Los comuneros de montes de San Lourenzo de Nogueira, en Meis, celebraron este fin de semana una asamblea para debatir, entre otros asuntos, la conveniencia o no de retomar el proyecto del gimnasio, que la comunidad empezó a construir hace unos años en el bajo del edificio sociocultural.

La directiva que preside Silvino Magariños cuenta con un informe técnico, en el que se especifica el coste que supondría para la comunidad la legalización de las obras, que quedaron paradas en su día. La puesta en marcha del gimnasio permitiría a los comuneros disponer de una nueva infraestructura deportiva -ya tienen piscina y canchas de tenis-, que podría ser de disfrute exclusivo de los vecinos o abrirse al público general, lo que reportaría a la comunidad nuevos ingresos económicos.

En la asamblea se presentaron asimismo las cuentas de la sociedad, que se han visto muy afectadas por la crisis económica. La comunidad de San Lourenzo depende en gran medida de las canteras de granito que hay en sus montes, pero el parón en el sector de la construcción ha motivado que la extracción de piedra también se haya ralentizado mucho.

El equipo de Silvino Magariños también cuenta con dedicar una nueva partida económica a las fiestas patronales del 10 y el 11 de agosto, que organizan los comuneros.