La alcaldesa de Vilagarcía, Dolores García, indicó ayer que desde el ayuntamiento se están realizando gestiones para evitar que el paso de los convoyes ferroviarios al muelle de O Ramal sigan causando los trastornos al tráfico de automóviles que sí se produjeron durante esta semana. La alcaldesa considera que una posible solución pasaría por encontrar un acuerdo entre todas las partes implicadas –Puerto, consignatarios, Renfe y Adif– para que el paso de los trenes se realice en horas en los que afecte poco al tráfico, como por ejemplo a primera hora de la mañana.

Y es que esta semana se retomó el paso del tren por O Ramal, y esto ha causado enormes atascos, ya que afectó a la circulación de la avenida Rosalía de Castro –la que se dirige a Carril–, que tiene un volumen de tráfico muy elevado sobre todo a estas alturas del verano.

Y es que, además, no se están cumpliendo los horarios previstos. Así por ejemplo, el pasado día 7 estaba previsto el paso de un convoy por O Ramal a las ocho de la mañana –cuando ocasionaría pocas molestias–, pero al final no lo hizo hasta las 12 horas, momento en el cual las calles de Vilagarcía estaban atestadas de vehículos.

Dolores García manifiesta que "este tipo de tránsitos siempre ocasiona molestias", y recuerda que el traslado por tren de esas cantidades de cereal evita el paso por la ciudad de hasta cincuenta camiones –con lo que no es del todo negativo–, pero admite que las horas de paso del tren no son las más adecuadas.

Si no se encuentra una solución los problemas podrían agravarse, puesto que hoy comienzan las fiestas patronales de Vilagarcía.

La Autoridad Portuaria, por su parte, defiende la necesidad del paso del tren, y se reafirma en su apuesta por el transporte intermodal, que es aquel en el que se combinan varios medios. La previsión es que este servicio se utilice dos días cada semana hasta octubre, pata trasladar 30.000 toneladas de cebada a Salamanca.