Tal día como hoy, hace 43 años, en un bar de Vigo corría el champán y volaban nécoras, cigalas y centollos. En el bar "El Compostelano" Pepe Silva anunciaba a voz de en grito la barra libre. El Gordo de la Lotería de Navidad había viajado hasta la Seara. Un buen puñado de afortunados se repartieron 300 millones de pesetas. Entre la clientela, sobre todo, jubilados y trabajadores de Barreras y de Citroen. Y también un compañero de FARO DE VIGO, que siguió el sorteo por teletipo "¡hasta que se lió su Gordo!".

La noticia

En la calle, entre los flashes de Magar, Siorty y Cameselle y la algarabía del "Compostelano", un periodista de FARO tomaba nota de la noticia:

"Pepe Silva, dueño del bar "El Compostelano", estaba en la plaza a las diez en punto de la mañana. Alguien, no se sabe quién, gritó de pronto: "El Gordo, salió el Gordo". Y Pepe Silva siguió ajustando centollos y bueyes. Nécoras y cigalas. Son estos días de mucho consumo, que la "extra" está al caer y quien más quien menos busca unas Navidades que compensen de tanto apretarse el cinturón. Por eso, tal vez por eso, seguro que por eso, Pepe Silva no hizo demasiado caso al "12176, con setenta y cinco millones de pesetas". O sí lo hizo, y se calló, que no se sabe. Pero Pepe Siva, lo supiera o no, en esos momentos era dueño afortunado, afortunadísimo dueño de siete millones de pesetas?".