En lo que concierne a la gravedad de los accidentes laborales, sólo 13 de los 354 acaecidos revistieron gravedad, mientras que ninguno de ellos le costó la vida a la víctima. Esta poco más de una docena de percances graves se reparten entre los 5 casos de Lalín, los 3 de A Estrada, dos tanto en Rodeiro como en Silleda y uno en Dozón, de modo que los siniestros de Cerdedo, Agolada y Vila de Cruces no pusieron en peligro la vida de los trabajadores heridos.