Rafael de los Arcos es un forofo del Celta de 36 años. Sin embargo, admite que "el fútbol que vemos ahora no tiene nada que ver con aquellos partidos en Balaídos a los que iba yo de niño y adolescente, que eran mucho más cercanos, en los que los seguidores se sentían realmente parte de esa lucha".
El realizador vigués opina, como muchos otros aficionados, que "la maquinaria del fútbol es un monstruo que se ha comido al deporte". Para reivindicar los valores del fútbol popular está inmerso en un proyecto documental que presenta al U.C.Ceares, un pequeño equipo de barrio de Gijón, con 70 años de historia a sus espaldas, que resiste con el presupuesto más bajo de la categoría. "Dimos con este equipo de forma casual; la idea no es tanto hablar de un equipo concreto sino contar cómo un grupo humano se une para sacar adelante un proyecto que sienten como propio", explica el director.
Hace 4 temporadas, el club asturiano agonizaba víctima de las deudas y la desatención hasta que cuatro amigos vinculados al club y sin ninguna experiencia, decidieron tomar las riendas del proyecto. Hoy el equipo vive su edad de oro, el ambiente en su campo es envidiado por todos los equipos de la categoría y, pese a lo humilde de sus recursos, cada año el club atrae a jugadores de gran calidad.?
Sin embargo, no todo es diversión y alegría en el Ceares. Ser el equipo más humilde de la categoría también provoca una lucha encarnizada contra los elementos para mantener el club a flote. Pero el U.C.Ceares tiene algo que los grandes clubes no tienen: el orgullo de saber que el equipo es de todos los que forman parte de él.
Boogaloo Films hizo suyo este orgullo desde el primer contacto que tuvieron con el equipo, hace ya tres años, y lo plasma en un largo documental dirigido por Rafa de los Arcos. Para hacer realidad el proyecto se ha iniciado una campaña de crowdfunding, activa hasta el próximo 21 de junio, para recaudar fondos que permitan que la historia del equipo más humilde de toda la tercera división del fútbol español salga a la luz. Una historia de supervivencia en los tiempos del fútbol astronómico.
"El cine en este país es muy complejo ya que no existe una verdadera industria. Los cineastas como nosotros dependemos mucho de las televisiones, que solo apuestan por los proyectos en casos muy concretos", explica el director, que apunta que necesitan para el rodaje 15.000 euros, "que con las recompensas se quedan en 10.000 euros".
De los Arcos ya dirigió el año pasado para RTVE el documental "Dos platos y un micro", sobre 30 años de hip hop en España y que recoge los testimonios de algunos de los principales artistas del género.
El tipo de documental que el realizador vigués quiere rodar en esta ocasión "es más de tipo observacional; lo que buscamos es que el espectador viva en primera persona cómo es un partido de un equipo de tercera -que es precisamente como comienza el documental- que no tiene nada que ver con uno de primera", adelanta el director.
