Tienen de plazo hasta el 20 de enero para solicitar permiso para cortar sus pinos pero todavía muestran recelo a hacerlo antes de conocer la compensación económica que recibirán. Vecinos de las parroquias de Taboexa, en As Neves; y Leirado, Lira y Meder, en Salvaterra, acudieron, ayer, a la oficina informativa instalada en la casa cultural de Leirado para preguntar a los técnicos de la Xunta sobre sus casos particulares y aclarar cuál es la mejor solución para cortar la madera de sus montes situados alrededor del foco positivo de nematodo del pino. Si no cortan ellos la madera antes del 28 de febrero, la erradicará la Xunta.
Muchos acuden a preguntar si podrían usar sus pinos para leña en sus hogares. Sin embargo, los técnicos les explican que esa opción no permitiría eliminar esa madera de inmediato, sino que habría particulares que la dejarían almacenada en sus casas hasta que secase y así no se erradicaría la plaga.
Manuel Álvarez es uno de los vecinos de Leirado afectados y calcula que tendrá que cortar alrededor 200 pinos. "Deberían valorar por número de piñeiros porque nun terreo pequeno pode haber moitos e nun monte moi grande pode haber poucos" explica Manuel.
Por su parte, Jesús García, de Meder, es el propietario de seis montes y teme por lo qué ocurrirá una vez talada la madera. "Cando se quite toda a madeira imos perder as referencias que tiñamos para coñecer as nosas propiedades; os marcos e as árbores limítrofes"; además, Jesús está preocupado por la reforestación. Considera que una vez que se hayan dado ayudas para compensar las pérdidas de los pinos afectados, no se darán subvenciones para plantar más.
Alicia Martínez es propietaria de cinco montes y se queja porque "os técnicos que mandaron non nos saben contestar moitas das cousas que lles preguntamos", asegura.
Todos ellos y otros afectados tendrán mañana otra oportunidad para aclarar sus dudas, en las charlas que darán técnicos de la Xunta en el centro cultural de Taboexa, a las 18.00 horas; y en el centro cultural de Leirado a las 20.00 horas.
