El equipo de gobierno de Gondomar al completo anunció ayer una querella criminal por calumnias contra la secretaria de Política Municipal del PSdeG-PSOE, Mar Barcón, por las acusaciones de corrupción vertidas sobre sus concejales. La número 2 de los socialistas gallegos habló de tramas urbanísticas, de dinero negro para comprar voluntades y de que la moción de censura fue urdida por "intereses personales", por eso solicitó, al igual que lo hizo el secretario provincial de organización del partido, Luis Piña, la disolución del Ayuntamiento por parte del Gobierno central tras conocerse el dictamen del grupo de expertos de la comisión antitransfuguismo que declara tránsfugas a los siete ediles populares y los cuatro ex socialistas.

El alcalde, el popular Martín Urgal, considera "una burla a los vecinos de Gondomar" la petición de intervención del Concello porque "deslegitima la mayoría democrática". El regidor considera que la iniciativa demuestra que "están nerviosos e intentan crear polémica porque lo estamos haciendo bien". "Este gobierno está funcionando y nos tienen miedo", recalcó.

Por su parte, el portavoz del grupo de no adscritos que formaron parte en su día del PSOE; el concejal de Urbanismo, Alfonso De Lis, instó a Barcón a "acudir a los juzgados si ve indicios de algún delito". "Por el momento tendrá que demostrar sus acusaciones ante el juez", aseveró.

De Lis incluso habló de contradicciones en la cúpula del PSOE gallego. Según sus palabras, alguno de sus miembros le pidió que encabezase la lista en el municipio para las próximas elecciones locales.