Iago Aspas no tendrá que declarar ante el Comité de Competición por el supuesto insulto racista contra el colombiano Lerma, del Levante, sobre cuyo caso tendrá que pronunciarse mañana el organismo federativo después de que la Liga solicitase que se abriese una investigación.

El goleador del Celta da por cerrado el caso: "Es un tema zanjado y si quieren investigar, que lo hagan", manifestó este mediodía desde la sala de prensa de A Madroa, donde el Celta retornó a los entrenamientos tras sumar ayer un triunfo en Anoeta que le sitúa provisionalmente en la séptima plaza, a las puertas de Europa.

Sobre el buen momento que atraviesa el equipo de Juan Carlos Unzué, Aspas admitió que les "faltaba coger confianza" y que ésta ha llegado con los resultados positivos, después de encadenar cuatro jornadas sin perder.

"Es el momento de engancharse arriba", dijo el delantero de Moaña tras recordar que el Celta llevaba tiempo buscando dos victorias seguidas en LaLiga. "Nos faltaba coger confianza. Ayer no comenzamos el partido de Anoeta de la mejor manera, pero el equipo estuvo tranquilo, defendiendo muy juntos y esperando oportunidades, como las tuvimos", comentó sobre el triunfo ante la Real Sociedad.

Sobre la polémica con Lerma, quien acusó a Aspas de llamarle "negro de mierda", el céltico explicó: "Ya le han dado todas las vueltas que le tenían que dar y no había nada. Como dije, lo que pasa dentro del campo se queda en el campo y lo que pasó en ese partido puede pasar en otros". Ni LaLiga ni el Comité de Competición han solicitado al moañés que declare sobre el incidente que se produjo en la anterior jornada de Liga en el campo del Levante. "Han pasado ocho días y ya habrán investigado, pero no ha salido nada más. Estoy muy tranquilo", añadió Aspas antes de reconocer que la polémica pudo haber "dañado" su imagen en el momento que se produjo, "pero el tiempo todo lo cura".

Dos jornadas de descanso

El Celta no volverá a los entrenamientos hasta el próximo jueves, pues Unzué ha decidido concederle dos días de descanso a la plantilla. Cuatro sesiones de trabajo tendrá por delante el equipo vigués para preparar el siguiente compromiso de Liga: el lunes 29 de enero ante el Betis (Balaídos, 21horas).

En el entrenamiento de ayer, el "Tucu" Hernández trabajó al margen, después de perderse el partido de Anoeta por una elongación en el aductor izquierdo. El internacional chileno realizó un entrenamiento individual.También se mantuvo al margen del grupo en parte de la sesión el argentino Facundo Roncaglia, quien sufrió un golpe en la clavícula en Anoeta, pero pudo completar el partido.