La historia del pensamiento incluye una vasta reflexión en torno a la existencia y la conciliación de opuestos y varias dicotomías (hombre-mujer, foráneo-nativo, libre-dominado, naturaleza-capital) son las vigas que sostienen el entramado de la última película de Rodrigo Sorogoyen, “As bestas”, su largometraje más depurado y completo hasta la fecha, aunque parecía difícil tras semejante carrera.

Entre sus virtudes, que son muchas, también debido a su afinado, y atinado, reparto, se encuentra el permitir a quien la ve juzgar por sí mismo y darle argumentos para comprender incluso a quienes las circunstancias han situado del lado oscuro de la historia, aunque Sorogoyen tenga claro que la víctima tiene prioridad.

Una historia que sí, bebe de sucesos reales acaecidos en Galicia, el enfrentamiento extremo entre unos extranjeros que han elegido vivir en el campo y de la tierra con unos residentes locales que no comparten su idealismo, pero que no busca rebajar su rural a un simple estereotipo, aunque juegue con él. Véase, en ese sentido, la conversación que mantienen los dos antagonistas, interpretados de forma soberbia por Luis Zahera y Denis Ménochet, que da para un buen debate.

“As bestas”, en la que los paisajes constituyen un elemento más en la obra, como en cualquier western que se precie, es una gran película, afilada como una guadaña, incómoda como una silla de tres patas, aunque más bien sean dos en una. Muy poco en la segunda parte, salvo el pulso del director y el enorme talento de los protagonistas que permea toda la obra, tiene que ver con la tensa y electrizante primera mitad, que mantiene en vilo al espectador. Hay un haz y un envés al abordar el conflicto y el largo epílogo sirve para detenerse, para reflexionar, para verter la atención sobre lo que pasa después, algo que suele obviarse, y en personajes, como la esposa del francés, grande Marina Foïs, que en un primer segmento están desplazados por la urgencia; para incidir en lo de adentro y no solo en lo de afuera.

“As bestas”, un western atípico vestido de thriller y un ingenioso artilugio para reflexionar sobre la libertad y los daños colaterales del capital, es, por ahora, junto con “Alcarràs”, antítesis “buenista” del mundo rural, la mejor película española estrenada este año.

FICHA TÉCNICA

Título: 'As bestas'

Dirigida por Rodrigo Sorogoyen

Guion de Isabel Peña y Rodrigo Sorogoyen

Reparto: Denis Ménochet, Marina Foïs, Luis Zahera, Diego Anido y Marie Colomb