El obispo emérito de Solsona y Sílvia Caballol, casados por la Iglesia

El papa concedió la secularización a Xavier Novell, ya unido por lo civil con la escritora erótica desde 2021 | Son padres de gemelas

Xavier Novell y Sílvia Caballol, ya casados por la Iglesia.

Xavier Novell y Sílvia Caballol, ya casados por la Iglesia.

E.P.

Xavier Novell, el que fuera obispo emérito de la localidad leridana de Solsona, y su pareja Sílvia Caballol han pasado por el altar y ya son marido y mujer con el permiso del Santo Padre. Así lo ha explicado la misma Caballol en un escrito en la red social Instagram, que acompaña con cinco fotografías de ambos en su casamiento rebosantes de felicidad. La noticia del enamoramiento, primero, y posterior enlace por lo civil del religioso y la escritora de literatura erótica resultó muy controvertida allá por 2021, haciendo correr no pocos ríos de tinta y levantando las suspicacias lógicas entre católicos y no católicos.

“Creía honesto, después de tanto de tiempo acompañándonos, no ocultaros que Xavier y yo, finalmente, nos hemos podido casar por la Iglesia, gracias a la misericordia del Santo Padre que le ha concedido la secularización. He quedado admirada de la gran calidad humana y espiritual del papa Francisco. Ha sido un camino largo, pero hemos podido regularizar nuestra situación canónica: casarnos como deseábamos y poder volver a recibir la comunión. Él continúa siendo obispo, pero sin poder ejercer el ministerio”, explica el texto de la psicóloga y escritora de novelas eróticas de la localidad barcelonesa de Súria.

Novel renunció por sorpresa a su cargo como obispo de Solsona el 23 de agosto del 2021. El motivo, en aquel momento desconocido no era otro que el de que el prelado emérito se encontraba en una relación romántica con Caballol. Tres meses más tarde, el 22 de noviembre, la pareja se casó por lo civil, en el juzgado de paz de Súria y, en abril de 2022, Novel se estrenó como padre de gemelas. Ahora, han dado un paso más en su relación y lo han confirmado por la Iglesia católica.

Caballol explica que, “muchos hubieran preferido ocultar esta información, pero siempre he creído que si se está convencido de aquello que hace y siente, hay que apostar por la naturalidad, la normalidad, la transparencia, ir de cara, sin dejar margen a la especulación, y andar bajo la luz. La oscuridad no creo que sea el que merece nuestro amor, ni la Iglesia. Tampoco creo que la ocultación que acompañó la renuncia de mi marido ahora hace dos años y medio, fuera para nada un acierto”.

Y añade: “Perdonadme todos aquellos que pensáis que habría estado mejor mantener el secreto, pero no puedo continuar obrando como no pienso ni siento. Dicho esto, no puedo hacer otra cosa que mostrar, un golpe más, la belleza del amor”.