El presunto líder de la red de blanqueo de dinero desarticulada en la operación Emperador, Gao Ping, amenazó por teléfono a uno de los miembros de la trama que pretendía desvincularse de ella advirtiéndole de que no dejaría "a nadie en paz" si le traicionaba, según una de las conversaciones telefónicas intervenidas por la Policía durante la investigación de este caso. Dentro de la red mafiosa, en la que también se investigan los delitos de organización criminal, amenazas, coacciones, extorsión y prostitución, había un encargado del aparato extorsionador, Haibo Li.