El fiscal solicita veinte años de cárcel para Luis Manuel Conde Failde, el vecino de la localidad coruñesa de Cambre de 43 años que mató a su ex novia en el área de servicio de San Simón, cercana al puente de Rande, en Vigo, y recorrió 170 kilómetros con el cadáver en el asiento trasero de un coche de alquiler hasta entregarlo a la Guardia Civil de Cambre.

La Fiscalía sostiene que el imputado, que será defendido por el letrado José Ramón Sierra, salió de su domicilio sobre las once de la mañana del 10 de noviembre de 2008 con la intención de asesinar a su ex pareja, una brasileña residente en la localidad lusa de Vila Nova de Gaia con la que tenía una hija de 4 años. El hombre, según el Ministerio Público, cogió dos cuchillos y emprendió la marcha en un vehículo alquilado hacia Portugal, donde había quedado con la víctima para entregarle a la niña tras pasar unos días en Cambre.

El acusado y su ex novia, con la que mantuvo una relación desde el año 2000 hasta el 2007, tenían "constantes discusiones", según el fiscal, por la custodia de la menor y porque la víctima tenía otra pareja. Cuando el sospechoso llegó a las inmediaciones de la vivienda de la mujer, la llamó por teléfono y le pidió que bajase. La fallecida, al percatarse de que la niña no estaba en el coche, se subió a él con la intención de que su ex novio la llevase a Cambre para recogerla, pero cuando llevaban sobre una hora de trayecto, el imputado detuvo el coche en el área de servicio de Vilaboa con la excusa de que estaba cansado de conducir.

El procesado aprovechó que la mujer bajó del vehículo para coger los dos cuchillos que ocultaba en su cazadora y clavárselos de forma "inesperada", según el representante de la Fiscalía. "Fue imposible cualquier tipo de defensa", subraya el fiscal, que imputa a Conde Failde un delito de asesinato. La víctima falleció en el acto. El Ministerio Público explica que el individuo introdujo el cadáver en el asiento trasero del vehículo y condujo hasta el puesto de la Guardia Civil de Cambre, donde llegó a las once de la noche. Allí confesó el crimen al agente que estaba de servicio y le entregó su documento de identidad y las llaves del coche. El funcionario comprobó que en la parte trasera del vehículo yacía el cuerpo de una mujer. Al lado del cadáver estaba uno de los cuchillos utilizados. El arma tenía el mango negro y una hoja de diez centímetros de largo y dos de ancho.

Conde Failde admitió en la declaración que prestó en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de A Coruña haber matado a su ex novia. Contó al magistrado que apuñaló a la víctima tras discutir con ella por la custodia de la hija que tenían en común. El acusado sostuvo que asesinó a su ex pareja en el área de servicio situada a las afueras de Vigo. La Policía Judicial, en principio, pensó que había cometido el crimen en Portugal porque la fallecida dejó de contestar a las llamadas de su hermana en cuanto salió de casa.