Un médico ha acreditado el estado de insalubridad de la casa de la familia Valle Barbero, en la pedanía lorquina de Campillo, que 21 días después de las inundaciones sigue rodeada de cadáveres de animales ahogados en las riadas, y que fueron arrastrados por el agua. Esta familia denunció esta semana, primero ante la Guardia Civil y después públicamente, que su casa continúa rodeada de ganado muerto de cuya retirada nadie se hace cargo. Ante la falta de respuesta de las administraciones, los propietarios han requerido un informe médico que acredita que "la casa no reúne las condiciones mínimas de habitabilidad por el alto riesgo de contraer enfermedades" transmitidas por vectores como los animales muertos.