La turba es el carbón de residuos vegetales. En Escocia e Irlanda, se ha utilizado durante miles de siglos como combustible pero también para darle el característico color al whisky. Científicos gallegos, además, le han encontrado otra utilidad: su análisis sirve para conocer la evolución de la polución atmosférica a lo largo de miles y miles de años. Tras un año tomando muestras, han detectado que los niveles de plomo y mercurio en la atmósfera gallega se han reducido desde finales de los años 80 hasta ahora sin repuntes.

Esta disminución se debe, según los expertos consultados, a "la puesta en marcha de políticas y medidas estatales y mundiales para reducir determinadas sustancias contaminantes. En los años 80, se empieza a prohibir la gasolina con plomo, que al quemarse a través del coche llegaba a la atmósfera".

El estudio ha revelado que aunque los niveles de mercurio y plomo en la atmósfera gallega han caído "a niveles de principios del siglo XIX", estos son mayores que "en áreas remotas del norte de Suecia" debido a las emisiones de carbón de las centrales de Meirama y As Pontes.

Galicia ha sido elegida como punto representativo de los análisis en España, ya que la Serra do Xistral –que separa la Terra Chá lucense del mar– es el lugar de España con mayor cantidad y variedad de turbera, áreas con turba.

Dentro de O Xistral, las muestras de turba se han tomado en la cima de la montaña "porque están en contacto directo con la atmósfera. No buscamos en el valle porque tendrían los metales de la atmósfera y los de la escorrentía de la ladera. También hay que decir que buscamos ambientes donde la contaminación sea baja. Si vas a un lugar con mucha polución, es muy difícil encontrar una señal previa al inicio de la contaminación",explicaba ayer Antonio Martínez Cortizas, profesor de de la Universidade de Santiago.

Cortizas es el investigador principal de un proyecto internacional que dirige y en el que también participa la gallega Eva Peiteado Varela (USC); así como investigadores de otros países. De hecho, se están extrayendo muestras de turba de Galicia, Groenlandia, Sudáfrica y otros países con muestras con una antigüedad de hasta 10.000 años. "Hemos elegido Suecia porque representa la zona boreal; Alemania y Galicia, la templada; Brasil y Australia, la tropical...", explica Martínez (Mugardos, 1961).