El delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, José Manuel Cores Tourís, visitó ayer la PO-531 a la altura de Bretoña, en el ayuntamiento de Barro, donde la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade va a poner en marcha una obra de mejora de la seguridad vial de manera que se facilite posteriormente la instalación de una senda peatonal y ciclista.

En la visita, el delegado territorial estuvo acompañado del jefe de la Agencia de Infraestructuras en Pontevedra, Manuel Ángel González Juanatey, el alcalde de Barro, Xosé Manuel Fernández Abraldes, varios concejales del PP así como representantes de los vecinos, con su presidente a cabeza, Manuel Corredoira.

Según informó Cores Tourís, la Consellería acaba de sacar a exposición pública este proyecto que permitirá mejorar la seguridad vial en esta zona de Bretoña. Así, se ejecutará una glorieta que facilitará el enlace con la carretera provincial que se encuentra en este lugar, así como un paso inferior como pedían los vecinos con el objetivo de que puedan atravesar carretera, tanto para coger los autobuses como para acceder a las fincas. En este sentido, se construirán también dos paradas de bus, se instalarán aceras y se reforzará el firme. También se renovará el drenaje longitudinal y se mejorará el alumbrado público, la señalización viaria y las barreras de seguridad.

Esta carretera presenta un elevado tráfico de vehículos y camiones, y atraviesa varios núcleos de población, con un promedio de tránsito al día de 19.000 vehículos. El presupuesto es de 1,6 millones de euros.