Por saturación, las lluvias han devuelto a la comarca de A Limia a una estampa del pasado. La acumulación de las precipitaciones de las últimas semanas y la incapacidad del suelo para procesar y drenar tanta humedad han provocado la inundación de una extensión de campos y explotaciones agrícolas de la llanura, simulando en apariencia a la antigua Laguna de Antela, un extenso humedal que fue desecado en los años cincuenta para el aprovechamiento agrícola de los terrenos.