La apertura del camping de Ons está un poco más cerca. La comisión informativa de Urbanismo e Facenda del Concello de Bueu dictaminó ayer favorablemente el proyecto, por lo que el único trámite que debe cumplir es la aprobación en comisión de gobierno, algo que debería suceder en los próximos días. De este modo, y casi tres años después de la adjudicación, las instalaciones de Chan da Pólvora podrían abrir sus puertas.
Desde la concesionaria de las instalaciones, el Grupo Acuña, se critica el evidente retraso de un proceso que ha fulminado tres de los 25 años de concesión fijados en el concurso. Aseguran haber entregado los últimos documentos requeridos por el Concello el pasado 5 de abril -el contrato con un gestor de residuos que recogerá los lodos procedentes de la depuradora y la inscripción en el Registro Galego Sanitario- y desde entonces estar esperando por el visto bueno definitivo. "Nos comentaron que a finales de abril podríamos tener ya la licencia de apertura, pero seguimos sin tener nada", apunta María Jesús Otero, gerente de la concesionaria, que lamenta que "la burocracia sea tan lenta".
Otero reitera que las instalaciones están en perfectas condiciones para su apertura, "y solo esperamos por los papeles". Turismo de Galicia ya ha visitado el lugar y emitido un informe favorable, por lo que el último trámite corresponde al gobierno local. La gerente del Grupo Acuña se muestra pesimista e incluso llega a afirmar que "a día de hoy no puedo garantizar tener listo el camping en verano. No depende de nosotros". El perjuicio ocasionado por no haber podido abrir antes es claro, señalan desde la empresa, y se ha hecho más visible en las últimas fechas. Primero por haber perdido la oportunidad de abrir en Semana Santa, una época propicia para visitar el archipiélago, y ahora este fin de semana, en el que la Volta Pedestre a Ons reunirá a un millar de personas en la isla. "Era una buena posibilidad para que pernoctasen allí", señalan.
Lo que más anima a la concesionaria de las instalaciones de Chan da Pólvora es la expectación que estas siguen despertando en la gente. "Nos llaman muchísimas personas interesándose por cuándo vamos a abrir, pero no podemos contestarles con seguridad", lamentan.
El camping dispone de una superficie de más de 8.000 metros cuadrados con 72 parcelas que pueden albergar a un máximo de 276 campistas. Las instalaciones, de segunda categoría, cumplen con todas las exigencias medioambientales al estar en una zona de especial protección y cuentan incluso con un parque infantil de 800 metros cuadrados.
