Un total de cuatro propietarios concentraban los terrenos expropiados en su día para poder llevar a cabo la ampliación de los jardines municipales de A Estrada. Todos ellos recibieron en su momento la cantidad estipulada por el tribunal de justiprecio y tres ellos decidieron llevar su caso a los tribunales al entender que no habían recibido una cantidad justa. Las dos primeras sentencias salieron en contra del Concello de A Estrada, que se verá abocado a pagar 240.000 euros más por dos zonas situadas hacia la rúa Iryda. Sobre el gobierno local pesaba sin embargo la alargada sombra de la tercera de las demandas, la interpuesta por los herederos de Manuel Campos Paseiro.

Estos poseían 3.218 de los 4.671 metros cuadrados ocupados forzosamente y habían recibido a través del justiprecio 1,2 millones de euros. En su demanda sin embargo pedían 5,6 millones de euros, casi cuatro veces más de lo que habían recibido. Esos 4,4 millones de diferencia suponían un riesgo para el Concello de A Estrada, que se quedaría además sin posibilidad de reclamación en caso de una sentencia en contra. Finalmente, el alcalde de A Estrada, José López Campos, y el edil de Facenda, Berto Blanco, anunciaron que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia ha dictado una sentencia "íntegramente favorable" al Concello, que no tendrá que pagar ni un euro más a la familia Campos Paseiro por la expropiación de sus terrenos.

El regidor local explicó que la denuncia de la familia se centraba en cinco puntos. Por un lado la falta de motivación para expropiar los terrenos, algo que el juez no compartió. También se desestimó la petición por modificación de la legislación del proceso de expropiaciones. Tampoco se consideró su denuncia por irregularidades en el PXOM, al calificarlo consolidado, ni por la licencia de obra denegada en su día. El principal punto se centró entonces en el precio marcado por el tribunal de justiprecio por los terrenos. Este se decide en base a la edificabilidad de los terrenos y al precio por el que se vendieron terrenos y pisos en la misma zona.

En este sentido presentaron un informe de un perito independiente. Esta tasación paralela marcaba un precio mucho más alto por sus terrenos pero fue descartado por el tribunal. Hizo lo mismo con el peritaje que ellos mismos encargaron y que había cifrado el precio de los terrenos en 1.7 millones. Consideraron en este caso que el precio marcado por el jurado de expropiación era coherente y razonado.

López Campos destacó las diferencias entre el tratamiento de esta causa y el de los otros dos terrenos, en los que el fallo fue en contra. "La diferencia entre esta sentencia y las otras es clara. Nosotros discrepamos de las otras dos", manifestó López Campos, quien señaló que la demanda en esos casos se había centrado en desacreditar el valor de venta a través de los casos que se habían cogido de ventas de terrenos y propiedades en zonas cercanas.

El regidor local recordó que la familia Campos Paseiro todavía puede interponer un recuerdo ante el Supremo. Considera sin embargo que esta sentencia los deja sin mucho margen teniendo en cuenta su forma. Además de ver desestimada totalmente su denuncia, la familia también tendrá que pagar las costas del juicio a la parte demandante.