Por las distintas rutas jacobeas pasan personas de lo más "grande" y estos días la Vía de la Plata está siendo recorrida por quien es considerada la mejor jugadora española de baloncesto de la historia, Amaya Valmemoro Madariaga. La madrileña es la gran protagonista de la quinta edición de El Camino acaba en Obradoiro, organizada por el Monbus Obradoiro. Anteayer llegó a Lalín en donde se hospedó en el Pazo de Bendoiro y ayer disfrutó de la jornada en la capital dezana. Realiza las últimas etapas desde el martes y se prevé que llegue mañana a Santiago de Compostela.

La exjugadora de baloncesto y actual comentarista de Movistar+ comenzó la etapa esta semana y recibió el bastón del peregrino por parte de Juan Antonio Corbalán, que es un exbaloncestista y médico español, uno de los mejores bases europeos de la década de 1980 y también uno de los mejores bases de la historia del baloncesto español. "No puedo estar más feliz, hoy hemos comenzado el Camino Jacobeo de la mano de la gran familia del Obradoiro", indicó la exjugadora a través de sus redes sociales en las que también señalaba ayer que no puede sentirse más contenta y que está siendo "una experiencia inolvidable" que le está permitiendo además conocer a muchas personas que aprovechan para mostrarle su cariño y su admiración. Amaya Valdemoro ganó tres anillos de la WNBA y ha participado en dos ocasiones en los juegos olímpicos, además de contar con numerosos trofeos, tanto colectivos como individuales.

Los jugadores del Club Basketdeza se desplazaron ayer, después del mediodía, a A Laxe para recibir a Valdemoro. Eran las 15:10 horas cuando llegaba en un coche para disfrutar de un momento con los jóvenes, que aprovecharon la ocasión, para fotografiarse con ella y dejar plasmado ese momento con una grande del baloncesto. Tenían pensando realizar un pequeño trayecto con ella, pero finalmente, como llegó cansada decidieron suspenderlo.

Los que estuvieron con ella destacan su carácter afable. "Es una persona súper humilde que para nada parece distante", señala una persona que coincidió con ella en el Pazo de Bendoiro. Allí también se hizo alguna que otra foto como con la gerente de este establecimiento hostelero, Graciela Vila.