El envejecimiento de la población y los escasos nacimientos son uno de los problemas que arrastra la sociedad desde hace tiempo y Deza y Tabeirós-Montes no es ajena a esta situación. De hecho, algunos de sus municipios menos poblados figuran a la cabeza de la provincia en los índices de envejecimiento. Esto, sumado a la una mayor esperanza de vida, supone que en los nueve concellos de las dos comarcas haya cerca de un ciento de personas que rebasen el siglo de vida.

Pero este fenómeno no debería interpretarse solamente en un contexto de envejecimiento poblacional, pues la longevidad no es solamente común en este territorio, sino que se debe a un cambio social. Si los gallegos están entre los más longevos de España, el peso de los vecinos de Deza y Tabeirós-Montes que han soplado ya las 100 velas es muy representativo en términos porcentuales en la comunidad autónoma y, también, dentro de la provincia. En Pontevedra -según los últimos datos estadísticos divulgados y correspondientes al pasado año- hay exactamente 564 centenarios,. Evidentemente la urbe más poblada de Galicia, Vigo, es donde más personas superan esta franja de edad, con 161 casos, mientras que en la capital de la provincia viven 39 centenarios. Lalín y A Estrada, las dos cabeceras comarcales, destacan claramente con respecto a otras villas, también de primera categoría, pero mucho más pobladas. Así, en la capital dezana el Instituto Galego de Estatística (IGE) identificó al cierre del pasado ejercicio un total de 24 personas con 100 o más años. Y en A Estrada son una veintena exacta. El secreto d la longevidad de los residentes en el norte de la provincia es una incógnita, pero resulta cuando menos curioso que los censos de centenarios de las dos principales localidades de la zona sea muy superior a los de, por ejemplo, Vilagarcía, donde hay una docena de personas que han llegado o superado el siglo de vida. Otros ejemplos son: Marín (8), Cangas do Morrazo (7), Ponteareas (9) u ocho también en Redondela, una urbe que tiene 9.000 habitantes más que Lalín o A Estrada.

Volviendo a los registros domésticos, de los 93 centenarios, las mujeres representan 65 casos frente a los 28 hombres. La mayor esperanza de vida entre las féminas se constata, por ejemplo, en Lalín, donde de los 24 casos, 17 son mujeres y en A Estrada suponen 14 de sus 20 centenarios. Más significativo es este episodio en Silleda, con 8 vecinos de 100 años o más y todas ellas féminas. El mismo número hay en Cruces, con 3 varones.

En el municipio de Agolada los siete casos son mujeres, mientras que los dos vecinos de Rodeiro más longevos son varones. Dozón es, según este informe oficial, el único concello de las comarcas sin centenarios. En Forcarei son ocho (5 hombres y 3 mujeres) y en Cerdedo-Cotobade se contabilizan 16 en total y 11 féminas. Hace solo diez años en esta zona había 36 centenarios.