La implantación de las consultas o expedición de recetas de manera no presencial están afianzándose, también, en los centros sanitarios dezanos. Nueve de cada cien de las consultas totales ya son atendidas por teléfono. Así se desprende de los datos que maneja la consellería correspondientes al pasado año, cuando en los centros asistenciales de Deza se cursaron un total de 389.082 consultas, de las que 35.544 fueron resueltas sin que el paciente tuviese que acudir a su centro sanitario.
En primer lugar destaca, como es razonable, Lalín, con un total de 203.938 consultas, de las que casi dos millares fueron telefónicas. Esto supone que las no presenciales aumenten un 10% con respecto a un año antes. En el ambulatorio de Silleda fueron 69.995 y 7.562 respectivamente, mientras que el desglose del consultorio de A Bandeira es de 16.400 y 1.809.
En la capital cruceña se contabilizaron 47.674 consultas (307 menos que el curso precedente) mientras que las telefónicas suben casi un 10% y alcanzan las 4.888. En Merza se incrementa la atención presencial, con 2.598 consultas, mientras que la telefónica desciende aunque en unos niveles casi insignificantes y totaliza 117. Rodeiro es el único concello dezano con menos consultas al bajar casi en un millar las ordinarias -fueron 26.015- y las telefónicas, 757. En Agolada suben ambas modalidades, con 22.462 y 972 consultas. En Dozón no hay datos, porque no realiza un cómputo de su actividad.
