| Lalín y Silleda fueron escenario ayer de sendos siniestros en los que se vieron implicados otros tantos coches. De madrugada, en torno a la una de la mañana, un Citroën C8 Picasso con las placas 4216 FGL ardió por causas desconocidas en el kilómetro 40 de la AP-53, en el carril de desaceleración hacia la salida de Catasós. Los bomberos del parque intercomarcal fueron alertados por el 112 y acudieron al lugar par sofocar las llamas que calcinaron por completo el coche.

Por otra parte, en la mañana de ayer un Audi A4 con las placas PO-2445-BH reventó el motor en pleno centro de Silleda, en las inmediaciones del Concello. También en esta ocasión fue requerida la presencia de los bomberos del recinto intercomarcal, que se personaron para realizar las tareas de limpieza de la calzada como consecuencia del aceite desprendido por el automóvil accidentado de manera fortuita.