El sector marisquero sigue adelante con su particular fase de "desescalada", aunque sea poco a poco. Tanto es así que a la almeja y el berberecho, que se colocan en los canales de distribución desde hace semanas, se suman ahora especies como el percebe.

Esta progresiva vuelta a la actividad se lleva a cabo atendiendo a la demanda planteada por los depuradores, que tienen clientes que atender a pesar de que la hostelería, que es su principal cauce de comercialización, sigue cerrada.

Pero hay restaurantes con servicio a domicilio que reclaman producto gallego, al igual que hacen un número cada vez mayor de supermercados y demás tiendas de alimentación.

De ahí la progresiva vuelta al tajo del marisqueo a pie y de los rañeiros -mariscadores de a flote-, quienes, en líneas generales, parecen satisfechos con los precios alcanzados en sus lonjas.

Baste como ejemplo lo sucedido en Carril, cuya actividad nunca se detuvo del todo, gracias a la labor de los parquistas.

Las cotizaciones

Hubo momentos en los que, prácticamente, fueron los únicos con capacidad para colocar producto en los canales de comercialización, beneficiándose así de elevados precios.

Unas tarifas que siguen siendo llamativas, con la almeja babosa a máximos de unos 20 euros, la fina, a 34, y tanto la japónica como el berberecho, por encima de los 13 euros el kilo.

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Y eso a pesar de que, poco a poco, se incorporaron a la faena "competidores" como los mariscadores de a flote de O Grove, donde la babosa cotiza esta semana a máximos de 21 y la fina lo hace a 34, situándose tanto la japónica como la almeja rubia por encima de los once euros.

Estos "rañeiros", que ayer faenaban en la ensenada de A Toxa, cesarán su actividad dentro de sus autorizaciones el día 30. Será entonces cuando, como se anunciaba ayer, se dedicarán junto a los miembros de otras cofradías a la campaña de libre marisqueo, en bancos como los de Os Lombos do Ulla, de nuevo bajo gestión de la Asociación de Rañeiros da Ría.

En el caso concreto de O Grove, el aumento de actividad también se notará desde el jueves que viene, cuando se sumarán a la misma las mariscadoras de a pie.

Junto a la labor de los mecos, y también como se avanzó en FARO DE VIGO en su momento, al hablar de esta escalonada vuelta al tajo, es de destacar la esperanzadora campaña iniciada por el marisqueo a pie de la cofradía de Vilaxoán, donde siguen con su labor durante toda esta semana y, en principio, también el lunes de la que viene.

Las mariscadoras vilaxoanesas

Así lo confirma Lourdes Corvo, la presidenta de su agrupación, quien indica que los precios alcanzados son razonablemente buenos.

Desde Corón, la zona en la que trabajaba ayer, detalló que en las últimas subastas en lonja el berberecho cotizó a máximos de hasta 13 y 14 euros, la japónica llegó a 13 y la fina, que "es muy bonita" en sus autorizaciones, rondó los 35 euros por kilo.

"Iremos valorando cada semana a qué ritmo trabajamos, dependiendo de la demanda del mercado y de los precios que alcance el producto en las lonjas, pero, en principio, estamos satisfechos con el resultado que estamos obteniendo", sentencia la presidenta de las mariscadoras vilaxoanesas.

A la citada extracción de almeja y berberecho hay que añadir la de algas, que se realiza tanto en O Grove como en A Illa, Cambados y otros puertos de forma casi ininterrumpida.

Pero también la recolección de percebe mencionada al principio, que comenzó ayer en O Grove. Lo hizo, más concretamente, en la costa atlántica de San Vicente, a instancias de los percebeiros asociados a la Confraría de Pescadores San Martiño, con socios tanto de la localidad grovense como de Ribadumia, Cambados, Meaño y Sanxenxo.

Ya en lonja, se vendieron 88 kilos de ese percebe meco, con un precio máximo de 68,30 euros y un mínimo de 12. Fue, junto a la almeja fina -a 28-, la cotización más elevada de una tarde en la que apenas se subastaron treinta kilos de centollo, con un primer "mío" de apenas 17 euros.