En la era digital la información circula a tal velocidad que alguien que está organizando un viaje de descanso puede pasar en poco más de un día de cancelar una reserva de hotel en una comarca determinada porque los partes meteorológicos para esas jornadas daban lluvia a reservar de nuevo en ese territorio, pero quizás en otro hotel, porque las previsiones han cambiado y anuncian sol. Algo así ha sucedido en las últimas horas en O Salnés, que vivió unas horas muy complicadas después de que las agencias meteorológicas anunciasen la entrada por Galicia de una profunda borrasca a partir de hoy miércoles. Varios hoteleros consultados por FARO reconocen que les cancelaron más de una reserva.
Sin embargo, hoy los partes meteorológicos pueden consultarse a través del móvil casi en tiempo real, y parece ser que la inestabilidad meteorológica en Galicia no será al final tan acusada desde el Viernes Santo. La consecuencia de ello es que paró el goteo de cancelaciones, y los hoteles han vuelto a recibir llamadas de turistas.
El sector turístico arousano está moderadamente satisfecho con los niveles de ocupación previstos para este largo puente festivo de Pascua. En Vilagarcía, los hoteles están llenos gracias a los eventos deportivos que se celebran estos días en la ciudad. En el resto de la comarca, los negocios que tienen más gente son los que trabajan con grupos organizados. Pero también los que se dedican a los viajes de particulares están más o menos contentos. Según sus estimaciones, se superará el 70 por ciento de ocupación desde el Jueves Santo. Una cifra similar a la estimación hecha en su día por el patronato de turismo Rías Baixas, que preveía un 75 por ciento de cuartos ocupados.
Hasta el 95 por ciento
Ángel Mourelos, que es dueño del Abeiras, un hotel de cuatro estrellas de O Grove, es optimista. "Tuvimos cancelaciones, pero al mismo tiempo entraron reservas porque la situación meteorológica parece que mejora a partir del viernes". Tanto es así que cuentan con una previsión de ocupación del 85 por ciento para mañana jueves, que llegaría al 95 por ciento el Viernes Santo. La previsión baja hasta el 70 por ciento en el caso del sábado, si bien Mourelos explica que en Pascua es relativamente frecuente que los viajeros dejen las reservas para última hora y hasta que entren por la puerta preguntando si queda alguna habitación libre.
"Nosotros contamos con llenar el hotel, si no todos los días, sí casi todos", añade el hotelero. Este plantea que, en cualquier caso, las perspectivas son mucho mejores que las de 2018, cuando la Semana Santa coincidió en el mes de marzo y estuvo pasada por agua.
En el Bosque Mar, también de O Grove, cuentan en estos momentos con una reserva del 70 por ciento para el viernes y el sábado, a expensas de lo que suceda con los turistas de última hora. "Son más o menos las cifras de 2018", afirman en este establecimiento, que también padeció el anuncio de la llegada de la borrasca en forma de alguna cancelación.
Jesús Piñeiro, dueño del Hotel Real Cambados, confía también en que la situación mejore a medida que se acerca el fin de semana. Ayer tenía ocupado el 60 por ciento de sus cuartos, y le parecía poco para un puente situado en la tercera semana de abril. De todos modos, recuerda que en este periodo vacacional, "hay gente que reserva de un día para otro".
En cualquier caso, Piñeiro no cree que el hecho de que los niveles de ocupación de los hoteles no sea más elevado no se debe solo a que el mal tiempo espante a los turistas. "Las viviendas turísticas y las casas vacacionales nos están matando. Por 30 o 40 euros la gente encuentra una habitación por internet, y ya no va a los hoteles. Tienes peores servicios y menos comodidades, pero como son unos pocos días, se acomodan". En el caso de los hoteles, en las páginas de alojamientos de internet pueden encontrarse cuartos por 50 euros la noche durante el puente festivo en hoteles de tres estrellas de O Grove.
Las pousadas
El precio es más elevado en el caso de los establecimientos de mayor gama. En el Eurostars de A Toxa (O Grove), la habitación cuesta 188 euros por noche, al menos en algunos de los principales portales de reservas por internet. En las pousadas, a mediodía de ayer quedaban dos habitaciones en la de Armenteira (Meis), a un precio de 270 euros por tres noches; y una en A Lanzada, a 285 euros en total desde el viernes hasta el domingo.
