La Agencia de Protección de la Legalidad Urbanística (APLU) no tomó la decisión firme de derribar el local social instalado por el Concello de O Grove en el barrio de O Sineiro.

Lo que sí existe es un informe presentado por el jefe de un departamento de la APLU, concretamente por el responsable del Servizo de Inspección Urbanística, Jesús Martínez López, en el que se concluye que las obras en cuestión no son legalizables y, en consecuencia, "procede ordenar su demolición".

Esto quiere decir que alguien en la APLU propuso derribar el inmueble, firmó la propuesta el día 20 y decidió comunicárselo al empresario grovense Óscar Miniño, que una semana después trasladó dicha decisión y el citado informe a los medios de comunicación.

Denuncias judiciales

Dicho empresario, que mantiene un tenso enfrentamiento con el alcalde desde hace años –motivo por el cual presentó varias denuncias judiciales contra él–, hizo que el informe del técnico de la APLU llegara a la prensa el martes, y la noticia se publicó ayer.

Fue entonces cuando el alcalde de O Grove, el socialista José Antonio Cacabelos Rico, y sus equipos técnicos y jurídicos se desayunaron la noticia en los medios de comunicación "con asombro e indignación", pues resulta que ese informe del jefe de servicio de inspección de la APLU que se había aireado a pesar de ser provisional no había sido enviado al Concello a pesar de ser parte interesada en el expediente.

Recursos

Y al parecer no se remitió al Concello porque en realidad la APLU no se pronunció de manera concluyente, e incluso cabe la posibilidad de que, una vez revisados los recursos presentados por el Concello de O Grove, ni siquiera se ordena el derribo del local social.

Así se lo explicó la directora general de la APLU, María Martínez, al alcalde meco, quien esgrime que "todo obedece a una filtración interesada".

Lamenta que "el informe de un técnico fue filtrado intencionadamente a la prensa, como si se tratara de una decisión definitiva de la APLU, cuando en realidad es una parte más del proceso y ni siquiera la directora de la agencia tenía conocimiento de esa propuesta de demolición".

Además, y dado que dicho documento tampoco fue trasladado al Concello, el regidor decidió contactar ayer con la directora de la APLU para pedirle explicaciones "y volver a explicarle que la caseta de O Sineiro es legal porque el suelo que ocupa forma parte del núcleo urbano consolidado, por mucho que Óscar Miniño y el PP se empeñen en decir lo contrario".

Fue en el transcurso de esa conversación entre el alcalde y la directora de la APLU cuando María Martínez le indicó que la decisión de derribar la caseta vecinal no es firme, y ni siquiera está tomada.

Ante esto, "vamos a confiar en las palabras de la directora de la agencia y vamos a esperar a que resuelvan el expediente, desde el convencimiento de que la caseta sí es legal o legalizable porque vamos a demostrar que O Sineiro es un núcleo urbano plenamente consolidado, y si esto se reconoce así también debe admitirse la legalidad de este nuevo local social".

"Filtración interesada"

Al tiempo que insiste en que "todo esto es una filtración interesada y una estrategia política auspiciada por el PP para tratar de atacarme en la campaña", José Cacabelos advierte de que "si finalmente la APLU quisiera tirar esta caseta tendrían que ser sus representantes los que vinieran a O Grove a explicar semejante decisión a los vecinos".

Lo que quiere decir es que no se permite este tipo de instalaciones en suelos rústicos, pero lo que el Concello de O Grove y el propio alcalde tratan de demostrar es que el suelo que ocupa el local vecinal de O Sineiro no es rústico, sino urbano.

No obstante, y aquí vuelve a aludir a la supuesta conspiración auspiciada por Óscar Miniño y el PP, José Cacabelos sugiere que "algunos se empeñan en decir que la caseta es ilegal porque lo único que quieren es desprestigiarme políticamente, y para ello no les importa dejar a los vecinos de O Sineiro sin este local social".

Termina diciendo que "nadie debe olvidar que gracias a la instalación de esta nueva caseta, con cargo al Plan E, en el gobierno que presido hemos conseguido sustituir una caseta que se había instalado hace un cuarto de siglo y cuyo estado era ya deficitario, penoso e incluso peligroso".