Investigan a un sargento de la Brilat por castigar a los soldados reptando entre zarzas y barro

Los hechos tuvieron lugar en 2022 dentro de un programa de instrucción

Ejercicios de la Brilat.

Ejercicios de la Brilat. / FdV

Un sargento de la Brilat se enfrenta a penas de prisión, acusado de un delito de extralimitación en el ejercicio del mando, por las órdenes dadas durante un ejercicio de instrucción. Obligó a los soldados “como castigo” a reptar por un terreno muy abrupto, a hacerlo también por barro y metiendo la cabeza en el mismo, o a reptar sin levantar el cuerpo un tramo casi vertical, que hacía imposible mantener el cuerpo pegado al suelo.

Según expone el auto del Tribunal Militar Territorial Cuarto de A Coruña, el día 18 de noviembre de 2022, dentro de un programa de instrucción, durante el desarrollo de una carrera algunos soldados se quedaban rezagados porque no podían seguir el ritmo que marcaba el sargento, por lo que algunos compañeros esperaban a los que venían más atrás, ordenándoles el sargento hacer esta espera en posición "de plancha".

Pasado un rato, algunos soldados volvieron a quedarse retrasados en la carrera, por lo que los que iban por delante retrasaron su ritmo para evitar que se perdiesen. Lo anterior –expone el auto-- provocó el enfado del sargento, que les manifestó que, ya que no querían correr, iban a reptar. Así, el sargento ordenó a los soldados reptar por un terreno que, tal como definen los testigos, estaba recién desbrozado y lleno de zarzas, palos y ramas, además de tener cierta pendiente, que se hacía muy pronunciada al final del tramo, lo que provocaba que fuese prácticamente imposible subir reptando sin levantar la cadera, o hacerlo a gatas.

Falta grave

Como el sargento consideraba que algunos soldados no reptaban dicha pendiente correctamente, les obligaba a bajar y subir de nuevo del mismo modo, reptando, por lo que algunos de ellos tuvieron que hacer el recorrido varias veces, como fue el caso de un soldado que al llegar a ese punto de gran pendiente, después de haber bajado para repetir el recorrido, se levantó, a lo que el sargento le ordenó que continuara. El soldado le respondió que era imposible reptar esa pendiente, que era vertical. El sargento le dijo que incurriría en una falta grave si desobedecía sus órdenes, a lo que el soldado contestó que le pusiera la falta, y que iba a informar de lo ocurrido a los jefes.

La tropa continuó con la carrera y aprovechando que había un gran charco de barro, el sargento ordenó a los soldados pasar el mismo reptando e introducirse bien en el charco, obligándoles a sumergir incluso la cabeza.

El sargento dijo a los soldados que lo que había pasado allí se quedaba entre ellos, a modo de secreto

A continuación, siguieron la carrera hasta llegar a una especie de pilón lleno de agua, ordenándoles el sargento que entraran en el mismo para quitarse el barro, saliendo del pilón empapados.

Según indica el auto, el sargento dijo a los soldados que lo que había pasado allí se quedaba entre ellos, a modo de secreto.

“A los soldados que formaron parte del grupo de carrera el día de los hechos no les cupo duda alguna de que el sargento les ordenó reptar durante la carrera como castigo y represalia porque algunos se quedaban rezagados”, expone la acusación. Igualmente, los soldados coinciden en que la pendiente final del tramo que hicieron reptando era casi vertical (de casi 90 grados), según expone el auto.

El procesado es un sargento del Ejército de Tierra destinado en el Regimiento de Infantería Isabel La Católica Número 29, con base en Figueirido.

Las actuaciones judiciales se iniciaron a instancias de la Fiscalía Jurídico Militar y el Tribunal Militar Territorial Cuarto de A Coruña acaba de desestimar el Recurso de Apelación presentado por el sargento, contra un auto anterior que ya acordaba su procesamiento en situación de libertad provisional.