La Audiencia Provincial reserva 4 días para juzgar el asesinato del hostal de Mondariz

El fiscal pide para el acusado 17 años de cárcel y sostiene que asestó “entre 80 y 90 puñaladas” a la víctima en enero de 2021 en el local donde residían

El acusado, Miguel Ángel G. M.

El acusado, Miguel Ángel G. M. / Redacción

Redacción

La sección cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra acogerá la semana próxima el juicio, con tribunal de jurado, contra Miguel Ángel G. M. que, en enero de 2021, asesinó presuntamente a otro varón en un hostal de Mondariz, asestándole “entre 80 y 90 puñaladas”.

Se han reservado cuatro días , desde el lunes hasta el jueves, para celebrar esta vista oral, que contará con un jurado popular. El calendario previsto establece que el lunes 13 se procederá a la constitución del jurado y a la declaración del acusado, mientras que el martes 14 se escuchará a los testigos y se practicarán parte de las pruebas periciales. El miércoles 15 se completará la intervención de los peritos y se formularán las conclusiones y los informes de las partes, para dejar el jueves 16 a la deliberación del jurado.

Según se recoge en el escrito de acusación de la Fiscalía, los hechos ocurrieron en enero de 2021. En esos momentos, acusado y víctima eran los únicos huéspedes de un hostal en Mondariz, y mantenían una mala relación de vecindad porque, al parecer, el acusado ponía música a gran volumen de madrugada, daba golpes en la pared y pedía con frecuencia tabaco a la víctima.

La víctima, que llevaba 17 años viviendo en ese establecimiento, trasladó a la propietaria del negocio sus quejas por la actuación del acusado y éste, al enterarse, le dijo al otro huésped que lo había “jodido” y que lo iba a “pasar por la piedra”.

El 9 de enero de 2021, el acusado compró un cuchillo de cocina en un bazar de Ponteareas, con unas características que, según el informe forense, son compatibles con las múltiples heridas que presentaba el cuerpo de la víctima (”entre 80 y 90” lesiones incisas por arma blanca).

La Fiscalía sostiene que, en algún momento entre la tarde del 17 de enero (cuando la víctima fue visto con vida por última vez) y la noche del 22 de enero (cuando fue localizado su cadáver), el acusado lo acuchilló hasta matarlo.

El procesado fue diagnosticado hace años de psicosis esquizofrénica paranoide y estuvo hospitalizado en varias ocasiones. Asimismo, consta que no tiene una buena adherencia al tratamiento que debe recibir de modo crónico.

Por estos hechos, lo acusa de un delito de asesinato, y pide que se le aplique la atenuante de alteración psíquica, ya que es posible que, en el momento de los hechos, tuviera una disminución parcial de su capacidad volitiva, aunque no conste una merma en sus facultades intelectivas.

Así, reclama que se le imponga la pena de 17 años de cárcel y que se le prohiba acercarse o comunicarse con los parientes de la víctima por un período de 23 años. También pide que indemnice a los familiares del fallecido.