Mosquera se queda como diputado provincial en un mandato en el que le releva Domínguez

César Mosquera, el vicepresidente en funciones de la Diputación de Pontevedra, se queda en este organismo, donde repetirá como diputado, aunque en esta ocasión en la oposición dados los resultados electorales del pasado 28-M, tras los cuales el Partido Popular recuperó el gobierno provincial.

Así lo anunció ayer el nacionalista, en un desayuno informativo en el que estuvo acompañado por María Ortega, diputada del BNG para este mandato por el partido judicial de Pontevedra. Completan esta lista Manuela Pomar, por el partido judicial de Vigo, y Beatriz Lomba, por el de Tui.

Aunque todavía no hay una fecha segura, se baraja que la nueva Diputación de Pontevedra quede constituida el próximo 5 o 6 de julio. Por el momento, de los tres partidos que aportan los 27 diputados hay confirmados 19.

"Para el buen funcionamiento de la institución es tan importante el gobierno como la oposición"

A los citados cuatro del BNG hay que sumar los nueve del PSdeG anunciados el pasado lunes: Carlos Font, Ana Mejías, Ana Laura Iglesias, Nuria Rodríguez, Gorka Gómez, Digna Rivas, Carlos Gómez, Javier Iglesias Mougán y Gregorio Agís, por Poio y el único por el partido judicial de Pontevedra, que retiene el acta que ya defendió en el mandato que ahora se termina.

En cuanto al PP, por ahora confirma seis de los catorce que ha conseguido: Luis López, Marcos Guisasola (concelleiro por Sanxenxo), Javier Tourís, José López Campos, Marta Fernández-Tapias y, Rafa Domínguez (por Pontevedra). Estos dos últimos como vicepresidentes, mientras que el primero será el presidente de la Diputación.

De este modo, el candidato popular del PP a la Alcaldía de Pontevedra relevará a César Mosquera en la vicepresidencia.

“Había razones para seguir y para no hacerlo, y al final tuvo mucho peso la opinión del alcalde de Pontevedra, que entendió que era importante que estuviera en la Diputación y los organismos que tenían que decidir entendieron esas razones y aquí estamos otra vez”, afirmó ayer Mosquera sobre su decisión final de continuar en el ente provincial.

“Que nadie espere de mí ni de nosotros que pongamos deberes ni que hagamos marcaje"

Recordó que lleva 32 años en el Concello de Pontevedra y otros 32 en la Diputación, de los cuales ocho fueron en la oposición y 24 en el gobierno, en el caso del gobierno local, y viceversa en el provincial. En este sentido, resaltó que “para mí la oposición es tan importante como el gobierno y el gobierno es tan importante como la oposición”. “Nunca fui de los que pensó que todo se termina en el gobierno y estar en la oposición es un fracaso. Es cierto que en la oposición las condiciones son totalmente diferentes, pero para el buen funcionamiento de la institución es tan importante el gobierno como la oposición. No es ningún desdoro ni nada parecido”, consideró. Es más, añadió que estando en la oposición logró “ciertos avances del gobierno que fueron positivos”.

Sin “espíritu de revancha”

Con respecto al futuro gobierno, fue tajante: “Que nadie espere de mí ni de nosotros que pongamos deberes ni que hagamos marcaje. Estamos hablando de dinero y políticas públicos y, por lo tanto, lo que espero es que lo hagan muy bien y, si puede ser, mejor, porque saldremos todos beneficiados”.

“Si vemos que las cosas no van por donde tienen que ir, así lo advertiremos”, dijo. “No tenemos ningún espíritu de revancha. Espero que los cambios que se hagan sean a mejor por el bien de la buena gestión del dinero público y de los avances que son necesarios en la sociedad”.

Sobre las críticas del actual portavoz del PP, Jorge Cubela, que reclamó que el bipartito provincial suspenda la toma de decisiones en la entidad provincial y acusó a socialistas y nacionalistas de cerrar convenios con concellos afines políticamente para “dejar con las manos atadas al futuro gobierno”, Mosquera replicó que “no hay nada de eso”. “No me gustan esas declaraciones. Es poner la venda antes de la herida. Es una actitud de mal ganador; no saben gestionar una victoria que llegó por sorpresa”, consideró el vicepresidente en funciones.