El marisqueo entra con buen pie en la Ría de Pontevedra

Las mariscadoras de Pontevedra volvieron ayer a enfundarse las botas y coger los rastrillos con la vuelta a la actividad en la ría. Tras la pausa motivada por la mortandad de los bivalvos con la llegada de aguas dulces, la marea permitió el jueves recuperar el marisqueo a pie en las playas de la costa pontevedresa. El inicio estuvo marcado por el optimismo de las tres cofradías de la zona, San Telmo de Pontevedra, San Andrés de Lourizán y San Gregorio de Raxó.

En el arenal de Lourido, las mariscadoras afirmaron que la sensación era buena y enfrontan el inicio con felicidad. “Buen producto y buenos precios”, resumían a FARO metidas en faena. La patrona de la Cofradía San Andrés de Lourizán relajaba, sin embargo, el optimismo. Carmen Vázquez Nora insistió en que la valoración debe hacerse “día a día”, pues los precios varían en función del mercado. Con todo, para tratarse de un mes el de marzo entre las temporadas fuertes (como son Navidades, el verano o la Semana Santa) el inicio de la campaña no es malo. “Los meses intermedios son normales, no puedes esperar grandes precios, pero se sigue trabajando”, indicó.

El berberecho, a la espera

La vuelta al marisqueo esta semana se hace con un tope de diez kilos y solo con la recogida de almeja japónica. Las cantidades se fijan de acuerdo a las tres cofradías, en función de la demanda (si el precio es muy bajo, se devuelve) y de las recomendaciones de los biólogos.

Por ello, precisamente, para la recogida de berberecho se esperará a la semana que viene. “El berberecho parece que se va recuperando, poco a poco. Es una buena señal”, aseguró el patrón de la Cofradía San Gregorio de Raxó, Iago Tomé. Tras recibir informaciones sobre la baja calidad de la especie anteriormente, se decidió parar su marisqueo. “Hoy (por ayer) se recogerán uno o dos kilos, por ver cómo va el mercado y el precio”, explicó Tomé.

A partir del día 16 de marzo se procederá a recoger “un poco de todo”, tanto berberecho como almeja japónica y fina. Aunque, de momento, la sensación para el patrón de Raxó es “buena” y “va bastante bien para la época en la que estamos”.

La sombra de Semana Santa

En un arranque positivo de la campaña de marisqueo a pie, lo único que nubla las expectativas de las mariscadoras es la incertidumbre en torno a la Semana Santa. La hostelería y los cierres perimetrales tendrán mucho que decir en la demanda y el precio de los productos y, por consiguiente, en la actividad en la Ría de Pontevedra.

“Tenemos incertidumbre por todo. La Semana Santa era una de las épocas con más precio para el producto, pero esta es la que es. Con la situación que tenemos de la pandemia... pues no sé, incertidumbre”, insistió Carmen Vázquez. A pesar de las dificultades de la pandemia, espera que se iguale la campaña a las de las pasadas navidades y del verano. “Ambas fueron buenas, dentro de lo que cabe, las expectativas son esas”, aseguró.