"Despertamos con el ruido de unas explosiones. Pensábamos que eran petardos, que es algo común aquí, pero al abrir la ventana nos encontramos con una humareda enorme y altas llamaradas", relata Ana Belén Gulías, una de las propietarias de los dos coches calcinados tras el incendio de unos contenedores en San Salvador. A partir de ahí, esta vecina de la calle Olivieira vivió 30 minutos de angustia entre lágrimas y desesperación viendo desde la ventana de su casa cómo las llamas llegaban a su vehículo, esperando a que llegaran los bomberos de O Salnés.
Junto a la Asociación de Vecinos de San Salvador reclama que se solucione este problema, y es que no entienden cómo estando la estación de bomberos de Pontevedramientras la situación se agravaba. "Mi coche se hubiera salvado y probablemente el otro también", señala Gulías ya que, cuando los vecinos llamaron al 112 la pasada madrugada del domingo, solo estaban ardiendo unos contenedores.
Además los vecinos explican que un tercer coche se salvó de quedar calcinado porque su dueño pudo sacarlo del aparcamiento a tiempo. "Alguien tiene que hacer algo para que esto cambie y no quiero esperar a que pase algo más grave", expresan. Por ello la asociación comienza una recogida de firmas para instar al Concello de Poio a solucionar esta situación.
Situación "intolerable"
La representante de la asociación vecinal, Desire Vaquero, tacha la situación de "intolerable" y señala que no es la primera vez que ocurre. "En la misma calle, en 2015, hubo un incendio en una casa okupa y entonces se nos prometieron soluciones, pero no hemos conseguido nada", expone.
Además la asociación señala que denuncian que se trata de un acto vandálico y que "no es algo puntual". Por ello solicitan que haya servicio de Policía Local nocturna, lo cual actualmente no es posible por el número de agentes que hay en el municipio. Además se quejan de que, al no haber este servicio, quien acude a estos incidentes es la Guardia Civil, que "tiene un radio de acción muy grande y por ello no siempre puede acudir a las llamadas o en ocasiones lo hace tarde".
Solicitud a la Xunta
Desde el Concello de Poio, la concejala de Seguridad Ciudadana, Marga Caldas, señala el apoyo del PP de Poio a esta petición e insta a que "junto con el Concello haga fuerza para que la Xunta (que es quien tiene competencias) dado que los concellos de menos de 20.000 habitantes no tienen competencias para los servicios de prevención de incendios. Para solicitar que la Xunta permita que vengan los bomberos más próximos y no los de O Salnés".
Sin embargo según la ley de emergencias de Galicia señala que en el caso de los concellos de menos de 20.000 habitantes es competencia del gobierno provincial "poner a disposición de la autoridad que ejerza las funciones de dirección y coordinación de cada emergencia los medios y recursos disponibles de su titularidad que figuren en los planes correspondientes cuando que les sean requeridos". También garantizar la prestación del servicio de protección civil y gestión de emergencias, incluidos los servicios contra incendios y de salvamento" y esto es lo que exigen los vecinos.
"Es una parroquia abandonada y no podemos seguir así ¿qué más tiene que pasar? ¿Qué se quemen más coches y llegue a los edificios? San Salvador ha crecido y no puede tener los mismos servicios que tenía antes, no por poner a la Policía Local en nuestra zona está solucionado el problema", recalca la asociación.
Por último los vecinos denuncian que la zona se ha convertido en un sitio de botellón y actos vandálicos. "Los fines de semana se juntan de madrugada coches con música a todo volumen haciendo botellón y al día siguiente el parque donde juega mi hijo está lleno de preservativos y botellas", señala Gulías.
En este sentido, Caldas pide prudencia y espera a conocer las causas del incendio para señalar si fue o no un acto vandálico y "actuar en consecuencia". Por último la concejala señala que le gustaría mantener una reunión con los vecinos donde poder escuchar sus quejas y actuar al respecto. Sobre la seguridad de la zona, destaca que el pasado fin de semana el Concello puso en valor esta misma zona eligiéndola como lugar de concierto. "Si el Concello considerara que es un lugar altamente peligroso no desarrollaríamos eventos en el mismo", sentencia Caldas.
