Tres son las características que hicieron triunfar al acordeón y extenderse prácticamente por todo el mundo: su naturaleza polifónica que posibilita el acompañamiento para melodías dulces, su potencia sonora que permite amenizar cualquier fiesta en espacios tanto cerrados como abiertos en las tradicionales romerías galegas y su facilidad para acompañar a otros instrumentos o incluso a otros acordeones. Esa es la filosofía de un instrumento que se popularizó especialmente en España María Jesús Grados y su Baile de los pajaritos. Todos estos elementos, incluyendo el éxito de María Jesús, según confiesa, fueron las motivaciones que llevaron a Juan José Mariño a hacer del acordeón su modo de vida desde niño.
Mariño hoy dirige la Escola de Acordeóns de Campelo. Una iniciativa que se creó en 1982 y que pasa por ser la pionera de este tipo en Galicia y de las primeras en crearse en España. "A lo largo de estos 37 años, muchos niños y no tan niños de nuestro Concello y de otros limítrofes pasaron por la Escola, llegando a formar una banda de acordeones que actuó por toda la geografía gallega en diferentes platós televisivos y canales autonómicos y estatales", indica el propio Mariño, que como reconoce, parecía destinado desde niño a acabar como acordeonista. "Yo prácticamente nací en la Escuela" , indica. De hecho, antes de llegar a dirigirla, fue uno de sus muchos alumnos pioneros en la fundación de la iniciativa que "mantiene viva la historia y la tradición del acordeón en Galicia".
"Muchos de los alumnos que pasaron por aquí, hoy en día tienen la música como su medio de vida, dedicándose a ello como profesionales del sector musical como músicos de orquestas y grupos musicales, maestros de colegios, instituto e incluso conservatorios", afirma el propio Mariño.
Uno de los secretos del éxito de la Escola de Acordeóns de Campelo radica en que es multigeneracional. "Hay desde niños de 6 años hasta adultos de 82, mezclando generaciones de padres con hijos e incluso nietos", afirma el director de la Escola. Su atractivo repertorio hace que triunfe en diferentes fiestas a las que llevan su música. "Gusta mucho allá por donde vamos y acabamos repitiendo porque el repertorio es bailable, conocido y permite cantar", explica Mariño.
Su buen hacer llevó a la banda de la Escola de Acordeóns a recorrer la geografía gallega e incluso en 2015 grabaron el que es, hasta el momento, su primer y único disco, "Entre foles". "Se presentó en diferentes radios e incluso en la televisión y estamos acabando una edición, pero se pueden solicitar por medio de
Banda juvenil
Y es que la agrupación está más viva que nunca ya que el pasado mes inauguró la banda juvenil formada por diez acordeonistas de entre 6 y 14 años. "Tenemos que hacer cantera y ahí está el futuro del acordeón", señala Mariño, que adelanta que, a pesar de su poca experiencia, podrían debutar en un concierto en público este mismo año.
En este año en el que se recupera tras 15 años sin celebrarse la Festa da Fátima de Campelo, su banda de acordeones actuará. "Es la patrona de nuestro pueblo, para nosotros es una honor volver a actuar en esta fiesta y que vuelva a tener continuidad la tradición", comenta el director de la Escola.
No será, ni mucho menos la única actuación de un grupo que, un año más, tiene previsto conciertos por toda España en centros gallegos, e incluso estudian propuestas para llevar sus música internacionalmente, en centros gallegos de la emigración. Siempre llevando sus acordeones y el nombre de Campelo por bandera, allí donde tenga cabida la música.
