Rueda quiso que su visita al Centro de Investigación de Lourizán sirviese también para dar a conocer este enclave, una "pequeña joya desconocida" a muy poca distancia de Pontevedra. Destacó no solo la importancia del Pazo, sino de todo el conjunto y de las actividades docentes y de investigación que se realizan en el ámbito forestal.

El vicepresidente de la Xunta reconoció que el palacio de Montero Ríos se encuentra en mal estado y que "no puede seguir así" dado que además el deterioro en los edificios vacíos avanza mucho más rápido que en el resto de inmuebles.