Las señales de tráfico en Pontevedra "seguirán en gallego" y no está previsto incorporar el español a sus textos pese a una sentencia que declara ilegal un aviso de prohibido aparcar en la calle Palamios porque solo está escrito en gallego. Así lo aseguró ayer el concejal César Mosquera, a raíz de la polémica levantada por el PP al airear, casi tres años después, una sentencia de julio de 2010 que anuló una multa a un ciudadano por no tener un texto en español o con ambos idiomas.

"No vamos a ceder", insiste Mosquera, que admite que entre 1999 y la actualidad ya se han recibido al menos tres sentencias similares y varias reclamaciones, "un número muy pequeño con respecto a todas las multas que se recurren", si bien existe ahora el riesgo de que crezcan estos recursos como fórmula para evitar la sanción. Pese a ese temor, no habrá señales bilingües, aunque sí se realizarán "reajustes" que Mosquera no llegó a concretar. "Se van a reajustar donde sea necesario pero bajo ningún concepto vamos a dejar de usar el gallego en las señales", afirma y contestó con un rotundo "no" al ser preguntado si estarán escritas en las dos lenguas.

El edil asegura que el gobierno local está "orgulloso e decidido" a mantener este criterio y vincula a "intereses políticos" el hecho de que "se esté creando un problema donde no lo hay".

La sentencia, dictada por el Juzgado Contencioso Administrativo número 3 de Pontevedra, retira una multa impuesta en 2007 a un ciudadano que recurrió la sanción que le impusieron por aparcar en una zona de carga y descarga, una infracción que provocó también que la grúa municipal retirase su vehículo. El demandante alegó que la señalización era "incorrecta" al estar sólo en gallego "y no en las dos lenguas cooficiales", lo que le impedía conocer con exactitud esa restricción. El fallo fue desvelado el pasado viernes por el portavoz municipal del PP, Jacobo Moreira, como ejemplo de lo "mal" que se está haciendo las cosas en el Concello.

César Mosquera entiende que esta polémica responde a un "ataque ideológico, no es una actuación inocente", ya que se trata de una sentencia de 2010 "que ahora agita el PP" cuando el ministro de Educación, José Ignacio Wert, "está inmerso en su ofensiva de españolización del país". Incluso vinculó la iniciativa judicial al "aparato del Estado" porque el recurrente "es un secretario judicial". También recordó que el fallo es de 2010 y desde entonces no hubo ese "ajuste" que ahora anuncia.

Por su parte, A Mesa pola Normalización Lingüística reclama "que se cumpla la legislación vigente y que todos los organismos públicos dejen de excluir al gallego en las señalizaciones", una denuncia que también expresó ayer Mosquera al asegurar que "Fomento solo las tiene en español". A Mesa recuerda que las señalizaciones públicas de competencia estatal deberían estar también en gallego y destaca que esta sentencia de Pontevedra "no establece jurisprudencia" . Por último, se pregunta "hasta cuándo la lengua propia de Galicia va a ser tratada como si fuera extranjera en la propia patria".