"Santa Paula, o Paula como familiarmente la llamamos, fue una religiosa italiana que vivió en la primera mitad del siglo XIX. Dedicó su vida a los demás, especialmente a la educación de los niños y de aquellos que no contaban en la sociedad de entonces, prestando especial atención a las mujeres; así, está reconocida en la historia como una luchadora por los aún escasos o casi nulos derechos de la mujer de su tiempo", explica Elena Vilán González, profesora del colegio Doroteas y una de las integrantes de la comunidad escolar que ayer dedicó la fiesta de la patrona a la solidaridad.
Los niños renovaron su compromiso con el comedor escolar del colegio que dirigen las religiosas Doroteas en Arequipa-Perú. Compraron bocadillos que comieron juntos en el patio y lo recaudado con la venta de este sencillo almuerzo se envía al centro latinoamericano.
Cada alumno participante en este almuerzo solidario, amenizado con música de Perú, abonó 3 euros. El objetivo es garantizar la compra de alimentos básicos para los alumnos del centro latinoamericano y en este 2012 el colegio pontevedrés se propuso remitir 5.500 euros que se invertirán en lácteos, fruta, cacao, avena y otros con los que preparar desayunos saludables y nutritivos.
"La generosidad de la comunidad educativa siempre supera con creces la petición desde Perú, viéndose cumplido año a año el objetivo propuesto", destacan las mismas fuentes.
Además de participar en este almuerzo solidario y en varios programas deportivos, los niños realizaron durante toda la semana actividades en las que reflexionaron sobre la justicia y la fraternidad universal, la solidaridad y la generosidad.
Pero también hubo tiempo para el deporte o para promover la alimentación saludable. Es el caso de los pequeños de Educación Infantil, que dejaron de gastar en golosinas para donar su dinero para el comedor de Perú.
