"Hemos demostrado en los últimos años nuestra buena disposición a colaborar pero si quieren (el Concello de Pontevedra) un acuerdo tienen que dar el primer paso. La pelota está en su tejado". Son palabras del presidente de la Diputación, Rafael Louzán, que ayer hacía un somero balance sobre los primeros contactos interinstitucionales para definir el futuro plan de actuaciones conjunto, cuyo interés ambas partes escenificaron en la primera visita oficial del alcalde Miguel Fernandez Lores al presidente provincial en el actual mandato.

Louzán considera que "no hay buena disposición porque hay una dualidad de gobierno (en alusión al bipartito municipal)" y reconoce que parten de planteamientos muy diferentes. Mientras la Diputación está interesada en coordinar actuaciones en relación al turismo, la musealización del patrimonio local y la cultura, el Concello estaría haciendo hincapié en concretar infraestructuras viarias y de calado y en acotar inversiones.

"Resolvamos lo que es prioritario, que no tiene coste alguno y si lo tiene es para la Diputación, actuaciones con el fin de ofrecer al ciudadano y a los turistas una mejor visibilidad de de Pontevedra", apunta el presidente provincial que, recalca que "si no avanzamos en esto no vamos a llegar a ningún acuerdo en infraestructuras". Máxime cuando, como cree, que "la Diputación cumplió con creces con Pontevedra en este terreno".

Louzán recuerda, por ejemplo, el puente sobre Monte Porreiro, cuya segunda fase, la conexión hasta Médico Ballina, se adjudicará en los próximos días y contrapone esta "diligencia" a las obras del entorno del campo de fútbol de Pasarón que siguen pendientes o el proyecto de A Parda.

"El gobierno local hace planteamientos de carreteras y de una serie de cosas que no son operativas, ni van a serlo a corto ni medio plazo porque no hay un plan general de ordenación municipal aprobado y, por ejemplo, no se pueden hacer determinadas expropiaciones para proyectos viarios" añade el presidente provincial que, sostiene también, que "plantean un documento con cifras que queda muy bien cara a la galería, pero saben que es una demanda hoy económicamente inviable".

Estas declaraciones no son óbice para que los equipos negociadores sigan adelante con su trabajo con el objetivo de consensuar un convenio de colaboración interinstitucional. De hecho el concejal del gobierno local y diputado provincial del BNG, César Mosquera, las enmarcaba ayer en la contienda electoral y apuntaba que ya hablarían después del 20-N.