A partir del 1 de julio un centenar de soldados de la Brigada Ligera de Infantería Brilat Galicia VII se desplegarán por los montes gallegos con un doble objetivo: servir con su presencia de elemento disuasorio frente a potenciales incendiarios y dar la alarma ante la aparición de algún fuego forestal, El contingente militar, que se distribuirá en 23 patrullas, se integrará en el operativo estival de lucha contra los incendios forestales que organiza y coordina la Consellería de Medio Rural.

El número de patrullas se podrán incrementar hasta 50 si el nivel de riesgo de incendios es "alto" y se podrá llegar al "esfuerzo máximo" de 75 patrullas, o lo que es lo mismo, más de 300 efectivos si se produce una situación de emergencia.

El peinado y control de los montes se hará con el apoyo logístico de vehículos, equipos de transmisión y dos helicópteros de vigilancia.

Las pautas del despliegue se detallarán en los próximos días, toda vez que hoy se firma el protocolo de convenio de colaboración entre el Ministerio de Defensa y la Xunta de Galicia. El Consello da Xunta ya dio luz verde a la firma de este protocolo, por el cual la administración autonómica reserva una partida de 630.000 euros para sufragar el coste del despliegue militar.

Además de las patrullas de vigilancia, en la provincia se instalará una base temporal del UME (unidad militar de emergencias) para colaborar en la lucha contra el fuego si se produce una situación de catástrofe como la vivida en el litoral gallego en el verano de 2006. Este contingente, integrado por personal especializado en emergencias, actuará, si fuese preciso, bajo mando directo de la ministra de Defensa.

Los soldados de la Brilat serán un apoyo más en el combate de Galicia contra los incendios forestales, por lo que están supeditados a Medio Rural. La consellería destinará, por ejemplo, para el distrito 19 (comarcas de Pontevedra, Caldas, O Salnés y O Morrazo) doscientos técnicos, agentes y peones a luchar contra el fuego.